Un policía municipal de Irapuato, acusado de presuntamente asesinar de un balazo con su arma de cargo a Cristhian N., un niño de 11 años que habría lanzado una piedra a una patrulla tras haber sido detenida su madre acusada de robo, fue vinculado a proceso por un juez, pues encontró elementos suficientes para determinar su probable responsabilidad en el hecho.
Fue la tarde del viernes cuando fue desarrollada la audiencia de vinculación a proceso por el delito de homicidio calificado. En esa audiencia estuvo presente Pedro N., el policía municipal irapuatense, quien el pasado 31 de mayo habría accionado su arma de cargo para disparar en contra de Cristian N., quien por la herida producida por la bala, murió dos días después en un hospital, pues uno de sus riñones fue perforado.
Así sucedió...
De acuerdo con información de la Fiscalía General del Estado, ese 31 de mayo elementos de la Policía Municipal acudieron a la calle Ampliación Guyana, de la colonia Ampliación Las Américas, a atender el reporte del robo de un tinaco.
Ahí avistaron a Araceli N. y su pareja, quienes fueron acusados por Juana N., una mujer a la que señalaron de ser expolicía, como quien les había robado un tinaco. Sin embargo, Araceli relató que ella había comprado el tinaco a un sujeto, de quien dio nombre y dirección de donde vivía e incluso dijo que ella no quería tener problemas y que regresaría el tinaco.
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Junto con su esposo, Araceli se subió a la motocicleta en la que viajaban, pero de pronto el policía jaló a la mujer, por lo que ésta cae de la unidad, por lo cual su pareja le reclamó del porqué la jalonea, si ya habían aceptado en devolver el tinaco.
“Pedro “N” somete al masculino, mientras otros elementos de la policía municipal de sexo femenino someten a la mujer y los abordan a la unidad oficial, en todo momento custodiados por el policía hoy vinculado a proceso y una mujer policía, quienes se colocan de pie, a un costado de los detenidos.
“Las unidades de policía se ponen en circulación en dirección del cuarto cinturón vial, momento en que el imputado saca de su cintura el arma de fuego corta, a su cargo y realiza varias detonaciones de arma de fuego en contra de las personas que se arremolinaron en el lugar, por curiosidad” (sic), dice el boletín oficial de la Fiscalía General del Estado, enviado la noche del viernes.
Producto de esos disparos que presuntamente realizó Pedro N. es que resultaron lesionados dos menores de edad: Cristian N. y Ramón N., este de 17 años.
Araceli no se enteró sino hasta que fue dejada en libertad que su hijo Cristian había sido lesionado; los médicos hicieron todo, pero el niño de 11 años no la libró y falleció el primero de junio, según reportó la Fiscalía General del Estado.
Protesta la familia
Tras este hecho, la familia de Cristian realizó una serie de protestas para exigir justicia. Incluso, el día del entierro del niño, su ataúd fue llevado hasta la puerta de la Fiscalía Regional B de Irapuato y en donde la exigencia fue la detención del o los policías que dispararon en contra de él.
Ante esto, las autoridades municipales dijeron que esperarían a que fuera la Fiscalía General del Estado la que determinara la posible responsabilidad del o los elementos presuntamente involucrados. Incluso, el propio alcalde Ricardo Ortiz Gutiérrez dijo que se llegara hasta las últimas investigaciones para que si había responsabilidades, éstas fueran atendidas.
Fue el 24 de junio cuando fue girada y cumplimentada la orden de aprehensión en contra de Pedro N. La audiencia fue desarrollada durante el viernes, en donde el juez encontró elementos para determinar su probable participación en el hecho y por ello lo vinculó a proceso y señaló un plazo de cuatro meses para la duración de la investigación, mismos que el elemento deberá pasarlos en prisión preventiva.
