“Manuelito”, así era conocido el joven hombre que fue asesinado por presuntos asaltantes el pasado lunes en la colonia Galaxias El Naranjal. Autoridades investigan para dar con los perpetradores.
El asesinato del hombre que, según dijeron los vecinos de la zona, se desempeñaba como ayudante de conductor de unidad del transporte público consternó a habitantes de la colonia que lamentaron la situación que se ha presentado con los asaltos, pues a decir de algunos, las noches en las calles del fraccionamiento cada vez parecen más inseguras, pues peatones, motociclistas y ahora transportistas han padecido por asaltos a mano armada.
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Y es que fue durante las últimas horas del lunes que se registró el ataque que le arrebató la vida a Manuel, que estaba terminando de ayudar a limpiar el camión de transporte público que fue su lugar de trabajo por tanto tiempo.
Vecinos relataron que Manuel era un joven alegre, muy trabajador y protector, algunas de las versiones en torno al hecho de la noche del lunes apuntaron a que cuando los presuntos asaltantes se acercaron al camión para exigirles sus pertenencias, “Manuelito” se encontraba con otras personas, su último movimiento fue uno de protección hacia el camión que era su lugar de trabajo y las personas que estaban cerca, los delincuentes le dispararon en dos ocasiones.
“´Él sólo estaba ganándose la vida, se la arrebataron cobardemente, nos consta que Manuelito era un hombre de bien”, señaló una de las vecinas de El Naranjal que aunque no vio el momento del ataque, se enteró de lo sucedido la mañana siguiente, cuando otros vecinos estaban lamentando la muerte del joven.
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El ahora fallecido había sido herido en al menos dos ocasiones, la gente salió pronto en su ayuda, trataron de contener la hemorragia que tenía en lo que lo trasladaban al hospital, pero a su ingreso fue declarado muerto, mientras sus familiares pasaban por el dolor tras la noticia de su deceso, en el lugar de los hechos policías municipales se encargaron de resguardar las posibles evidencias que quedaron dentro de la unidad del transporte público, para garantizar que los agentes de la Fiscalía General del Estado pudieran tomar material genético, huellas digitales y otros indicios como los casquillos percutidos que serán analizados para dar con los posibles responsables del asesinato.