Tres viviendas fueron cateadas y aseguradas en una misma calle en el Barrio de la Salud, al menos una persona fue detenida y también se aseguraron múltiples objetos, entre ellos partes automotrices y de motocicletas, relataron testigos.
En la misma calle agentes aseguraron un motor, una motocicleta y al menos a una persona, elementos del Grupo Especial de Reacción Inmediata (GERI), Agentes de Investigación Criminal y patrullas de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano se colocaron en los extremos de toda una cuadra hasta salir al bulevar Diaz Ordaz, donde comerciantes y vecinos empezaron a salir alarmados por la presencia de las corporaciones.
De acuerdo a lo dicho por lugareños, los agentes buscaron primero asegurar el perímetro, debido a la extensión de algunas propiedades en la zona, rodearon al menos toda una cuadra y los elementos del GERI tocaron una puerta de una de las viviendas para cumplimentar una orden de cartero, pero al no recibir respuesta hicieron uso de la fuerza para ingresar.
Pero a lo largo de más de una hora, los agentes empezaron a entrar por las puertas principales de otras viviendas que estaban en la misma calle, entonces potros habitantes de viviendas de la calle 1910 trataron de salir para ver qué pasaba, pero los agentes les solicitaron que ingresaran en sus hogares pues la zona podría ser insegura, y no les quedó más que atender a la indicación.
Pero lo poco que pudieron observar fue que dentro de uno de estos domicilios extrajeron una motocicleta y una parte de un motor de otra unidad, además, de otra vivienda sacaron a un hombre cubierto por una cobija, pero con las manos esposadas por la espalda, lo cubrieron para no vulnerar su identidad y lo pusieron a disposición de las autoridades correspondientes.
Tres viviendas fueron aseguradas y en las entradas colocaron sellos de aseguramiento, otros vehículos estacionados en la calle fueron registrados para descartar que contaran con algún reporte, ya cuando todo fue abordado en las unidades oficiales, los agentes partieron en caravana escoltados por el Ejército Mexicano.
En la calle 1910 sólo quedaron los sellos en las puertas, y la zozobra entre vecinos que solo murmuraban preguntando qué había pasado y un perro que desesperado, quería entrar a una de las viviendas que quedó cerrada y vacía.
Será durante las próximas horas que la FGE dará a conocer los resultados de esta operatividad.