Muerte de migrantes en Chiapas es consecuencia de la militarización de la política migratoria: CEM

La CEM afirma que es obligación del Estado mexicano el llevar a cabo una investigación seria, imparcial y efectiva

Jorge Salcedo / El Sol de México

  · jueves 3 de octubre de 2024

La presidenta Claudia Sheinbaum informó que la Fiscalía General de la República (FGR) ya está investigando el caso en coordinación con la policía militar. / Foto: José Betanzos / Cuartoscuro.com

La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) rechazó el uso de la fuerza letal por parte de agentes del Estado que ocasionó la muerte de seis migrantes y otras 10 personas heridas en Chiapas.

El Episcopado acusa que esta tragedia no es un hecho aislado, sino la consecuencia de la militarización de las políticas migratorias y de la mayor presencia del Ejército en la frontera sur del país.

La CEM afirma que es obligación del Estado mexicano el llevar a cabo una investigación seria, imparcial y efectiva. De lo contrario se estaría “comprometiendo la responsabilidad internacional del Estado mexicano.”

Asimismo, la CEM le solicitó al Estado a tomar medidas para la no repetición y que limiten la presencia de las Fuerzas Armadas en labores de orden público, así como en materia de control y revisión migratoria, para “asegurar el cumplimiento de medidas preventivas en el uso de la fuerza.”

Durante la conferencia mañanera de este jueves 3 de octubre, la presidenta Claudia Sheinbaum informó que la Fiscalía General de la República (FGR) ya está investigando el caso en coordinación con la policía militar. También afirmó que se comunicó con el secretario de la Defensa Nacional, el general Ricardo Trevilla Trejo, a quién le instruyó que este tipo de casos no vuelvan a ocurrir.

Lee más: Militares disparan a migrantes en Chiapas: hay seis muertos

El comunicado de la CEM termina por solidarizarse con las víctimas y sus familiares. También extiende una oración a las personas migrantes que murieron a manos del Ejército mexicano y por la pronta recuperación de las personas heridas.

“Como Iglesia que acompaña siempre a los más pobres, confiamos que la violencia nunca será la solución. María madre de migrantes y refugiados, extienda su manto de amor protector a quienes tienen que huir por amenazas, y únicamente buscan una vida digna y trabajo para llevar el alimento a sus familias”.