Karla Aguilera Rangel

Irapuato, Gto.- Sólo 50% de las mujeres quesufren de violencia en Irapuato terminan su tratamientopsicológico; la otra mitad no lo continúa por temor a cambiar suestado personal y psicológico.

Así lo afirmó Magdalena Benavides,coordinadora del Centro Especializado de Atención a la ViolenciaFamiliar (Ceavif) del Hospital General de Irapuato, quién dijo queen los últimos 10 años en Irapuato sólo mil 286 mujeresviolentadas terminaron su tratamiento de las 15 mil 388 mujeresviolentadas que fueron atendidas, entre ellas cuatro mil 145mujeres necesitaron intervención médica, 11 mil 243 psicológica,así como también fueron creados 60 grupos de ayuda, ademásinformó que durante este año atendieron 380 mujeres en casos deviolencia.

“Muchas mujeres no terminan el tratamiento,porque también implica un cambio de ellas, en no permitir, cambiarcreencias, saber lo que es ser mujer y puede resultar hastaincómodo u ofensivo para ellas, así que les resulta máspráctico seguir en violencia que cambiar eso, además hay muchasque no cuenta con el apoyo de la familia o no quieren dejar larelación”, explicó Magdalena Benavides.

La coordinadora del Ceavif Irapuato dijo que elservicio que brinda el Hospital General es más a la violenciasevera, ya que reciben mujeres que ingresan por el servicio deurgencias o porque son detectadas con signos de violencia mientrasestán en hospitalización, incluso porque intentaronsuicidarse.

Por ello, fue llevada a cabo la jornada para laeliminación de la violencia a mujeres y niñas, en dondeasistieron decenas de mujeres que sufrieron de violencia, con lafinalidad de concientizar a más mujeres sobre los casos de abuso yviolencia e invitar a denunciar.

El director general del Hospital General,Rafael Arredondo Zapién dijo que una de cada tres mujeres hansufrido de violencia en alguna etapa de su vida y de los casos quemás han atendido son mujeres que han sufrido violencia extremacasi hasta la muerte, por lo que invitó a las mujeres a levantarla voz y conocer sus derechos, así como orientar, prevenir einvitar a más mujeres a no sufrir de violencia física, sexual ypsicológica.

“La violencia a la mujer es un tema que teniaque retomarse desde hace mucho tiempo, tenemos que conocer losfactores que influyen para que la violencia se presente, ademáslos estereotipos también generan la desigualdad y violencia, esosgeneradores los hace la misma familias hasta la pareja; en estehospital la violencia física y sexual es la que más llega,mujeres que han sido agredidas de manera 'salvaje', esto conllevaque después haya problemas psicológicos que repercuta en su viday en sus hijos”, dijo Arredondo Zapién.

Por otro lado la regidora del Ayuntamiento,María Gracia Roque Díaz de León mencionó que desde hace 36años se estableció el 25 de noviembre como el día internacionalpara evitar la violencia en la mujer y poco a poco más mujeres quehan sido víctimas de violencia se han animado a denunciar y buscarayuda profesional, destacó que es importante reconocer cuando unamujer no está bien, así como evitar la vergüenza y miedo abuscar ayuda.

“Tenemos que respetarnos en el sentido de queestamos formando hijos e hijas y tenemos que inculcarles eserespeto y darles seguridad, si no lo hacemos no vamos a lograr uncambio, hacerlos fuertes y, en un momento dado, lo más importateserá a estar abiertos a recibir el apoyo de programas, reconocercuando una no está bien, que no esta mal pedir ayuda, que no esvergonzoso y que no tengamos miedo a salir de ese ambiente deviolencia, por miedo al qué dirán, porque podemos salir solas,transmitir ese respeto, enseñar a los niños la igualdad yerradicar la violencia”, expresó Roque Díaz deLeón.

Durante la jornada algunas mujeres dediferentes edades que sufrieron de violencia física, psicológicay sexual, contaron su testimonio y experiencia al atreverse adenunciar y llevar un tratamiento para mejorar sucondición.

“Cuando era niña recuerdo que mi papáviolentaba a mi mamá, con miedo y desesperación no sabia comoayudarla, hasta que finalmente mi mamá lo dejó, de ahí pasé aconvivir los días de descanso con la familia de mi papá y mimamá; cuando me quedaba con mi papá, me dejaba sola con mi primoy el me invitaba a 'jugar' recuerdo que no me gusta lo que hacia,me hacia sentir muy mal, avergonzada y sucia, hasta que mi papádejó de buscarme y dejé de ir a su casa. Yo me quedé callada ynunca conté nada, porque pensaba que o me iban a creer y me iban ajuzgar; al entrar a la secundaria comencé a recibir educaciónsexual, aprendí que lo que me hacían era abusar sexualmente y mesentía avergonzada, comencé a meterse en problemas, no meconcentraba ni lograba hacer mis tareas, hasta que su mamá hablóconmigo, del por qué tenía ese comportamiento, le conté delabuso y me llevó a atención psicológica, me ayudaron a entenderque yo no fui responsable del abuso y de más cosas; al terminar eltratamiento me sentí mejor y entendí muchas cosas, ahora soy unapersona muy fuerte, y le digo a ustedes que no están solas, no sequeden calladas, pidan ayuda y siempre habrá alguien paraapoyarlas”, contó Ariday de 13 años de edad, quien fue abusadasexualmente y fue testigo de violencia intrafamiliar.