En 2017, Graciela Delgado, habitante de la comunidad de Venado de San Lorenzo, cumplió sus 15 años y el primer padrino que eligió no fue el de vestido, ni el de comida ni mucho menos aquel que se hiciera cargo de la misa: su primer padrino que escogió fue aquel que se encargaría de regalarle una pipa de agua, ya que en su comunidad tenían varios años sin recibir el líquido y que para el día de su fiesta sería fundamental para que fuera realizada sin contratiempos.
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- De acuerdo con Conagua, el acuífero Irapuato-Valle es uno de los más sobreexplotados del centro del país
Venado de San Lorenzo es una comunidad de Irapuato que está casi en la colindancia con el municipio de Romita y donde desde el año 2010, sus habitantes no tienen agua.
- En mayo de 2018 intentaron construir su pozo, pero no había agua
David Delgado es uno de los habitantes de la comunidad de El Venado y quien recordó que antes el agua que había en la zona serrana se la dividían entre los habitantes del “otro Venado” y el Venado de San Lorenzo, pero un día todo eso terminó.
“Un día dejó de haber agua. Nos dijeron que todos tendríamos un pozo de agua, pero sólo se los hicieron a los de la otra comunidad de El Venado de arriba y a ellos les hicieron una noria y cuando esto pasó, a nosotros nos dejaron de mandar agua de allá; antes, toda el agua del cerro nos llegada tanto a ellos como a nosotros, pero ya no”, cuenta el hombre.
- 600 pesos cuesta una pipa de agua para los habitantes de Venado de San Lorenzo
Por ello, los habitantes de Venado de San Lorenzo esperan con ansia las lluvias, pues no sólo éstas les sirven para regar sus cultivos de temporal, sino también para acaparar agua que les sirve para máximo tres meses y que generalmente la usan para limpiar sus casas y bañarse.
No obstante, cuando no llueve, los habitantes de Venado de San Lorenzo andan cazando a las personas que bombean agua de sus pozos para pedirles que les venda un poco de líquido.
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Para los habitantes de la comunidad, la compra de pipas de agua es una práctica común y para llenar sus bidones de mil litros pagan entre 30 y 60 pesos, según quien les venda el agua; además, si quieren comprar una pipa de 10 mil litros, tienen que pagar entre 600 y mil pesos, pero sólo unos pocos pueden darse ese lujo.
El pozo sin agua
Aquel siete mayo de 2018, los habitantes de la comunidad de El Venado lo esperaban con ansia y no era para menos, pues por fin perforarían un pozo para poder tener su propia agua.
Era lunes y las máquinas para perforar la tierra llegaron a la comunidad y comenzaron a trabajar sobre la recién creada plancha de concreto que fue hecha para el que sería el nuevo pozo de la comunidad.
Entonces, la máquina bajó 10 metros, 20 metros, 50 metros, 100 metros, pero no había agua. Decidieron ir más a lo profundo y perforaron la tierra hasta los 200 metros, a los 300 metros y nada, no había agua. Tuvieron que hacer otro intento de perforación y fue hasta los 350 metros cuando encontraron agua; sin embargo, sólo encontraron tres pulgadas de agua, es decir, nada para lo que necesitaban las 300 familias de El Venado en consumo de agua.
“Sí encontraron agua, pero ocupa más dinero y tiene muy poca agua, ya la gente no quiso cooperar porque sale más caro sacar esa poquita agua que lo que en realidad tiene”, dijo María Mendoza, vecina de la plancha donde sería construido el pozo.
Región con estrés hídrico
El caso de Venado de San Lorenzo es uno de los ejemplos que explican la sobre explotación de los mantos acuíferos, pues cada vez las perforaciones se hacen a mayor profundidad para extraer agua.
En noviembre pasado, durante su visita a Guanajuato, la titular de la Comisión Nacional del Agua, Blanca Jiménez Cisneros, dijo a Organización Editorial Mexicana que uno de cada tres municipios presentaban algún grado de sequía, o cual originaba que los mantos freáticos estuvieran estresados y por consiguiente fuera más complicado extraer agua del subsuelo.
Para el caso de Guanajuato, los acuíferos más estresados son el Irapuato-Valle de Santiago, el Celaya-Valle de Santiago, la parte de Salamanca y la región de León.
Incluso, explicó que en estas zonas está siendo extraída agua hasta a 600 metros de profundidad, lo cual origina que el líquido obtenido salga contaminado con metales pesados y arsénico.
La actual administración municipal tiene entre sus compromisos llevar agua, drenaje y electrificación a todas las comunidades de Irapuato. Los habitantes de Venado de San Lorenzo esperan que de concretarse esto, por fin puedan dejar de batallar por el agua, aunque de acuerdo con José Delgado, habitante de la comunidad, eso los ha enseñado a apreciar el verdadero valor que tiene el llamado vital líquido y que no necesariamente es el monetario.