Tras la explosión del polvorín en la comunidad Peñuelas, trabajadores de los polvorines vecinos se encuentran en la incertidumbre, pues no saben cuándo podrán volver a sus labores.
El área que fue escenario de la explosión la noche del jueves consta de al menos tres polvorines o fábricas de pirotecnia distintas, de diferentes propietarios en las que de acuerdo con lugareños fueron dos las afectadas.
Sin embargo las otras instalaciones quedaron íntegras, o así parecía a simple vista, trabajadores llegaron temprano para ver de qué manera podrían proceder, pero autoridades les impidieron el paso hasta que se realizarán las diligencias.
Trabajadores de uno de los polvorines esperaron afuera de la puerta, uno de ellos relató qué se encuentran con la incertidumbre de no poder volver a laborar ya que, aunque saben que los sitios donde trabajan cuentan con permisos y normas de seguridad, no sería la primera vez que resultan afectados por explosiones en otros puntos, inclusive la del "Domingo Negro" en Celaya, pues en 1999 quisieron retirarle permisos a todos por lo sucedido.
"Si cuando fue la explosión de Celaya vinieron que nos iban a quitar el permiso, no sabemos qué va a pasar ahorita".
Por otro lado, los trabajadores del recinto que explotó permanecieron herméticos, el velador del lugar aseguró que en su recorrido vio entre los escombros una Virgen de Guadalupe qué quedó entera pintada dentro de uno de los cuartos, sobre los motivos de la explosión no saben nada.
El lugar continuó a resguardo de elementos de la Guardia Nacional y la Fiscalía General del Estado también hizo algunas pesquisas durante la mañana en busca de determinar la causa de la explosión.