¿Te gusta la cerveza? Visita el Museo de la Cerveza en Irapuato y pruébala

En medio de los barrios tradicionales de Irapuato, se encuentra un lugar que los amantes de la historia y la cerveza no pueden dejar pasar en su visita por la capital de las fresas, se trata del Museo de la Cerveza, donde además de conocer más de esta bebida y su historia, se puede degustar distintos tipos de ella, entre ellos dos de fabricación local que fueron reconocidas a nivel internacional.

El Barrio de San Cayetano se encuentra a solo 15 minutos de la Central de Autobuses y a una cuadra del Museo Salvador Almaraz entre las calles Cinco de Febrero y Manuel Acuña en una casa antigua en medio de lo que también es conocido todavía como Barrio de la Piedra Lisa.

Miguel Hernández Roque, es anfitrión de este recinto que conjuga el gusto por la cerveza, la historia y la cultura dentro de estos muros, explicó qué lo que empezó como un homenaje a su abuelo, que inició a fabricar cerveza en 1920, retomaron esto para honrarlo, ahora están por cumplir 10 años fabricando esta cerveza artesanal.

Con las tres torres del templo de San Cayetano como escenario principal, la sala Genaro Roque alberga los reconocimientos que en 2023 obtuvo la cerveza local en la competencia de Lyon, Francia, en la que su cerveza clara obtuvo el oro y la oscura la de plata.

“Estamos en el Barrio de San Cayetano, uno de los más importantes y que dio parte al origen de esta ciudad, pues formó parte de las varias cofradías en Irapuato, es una casa ambientada, una casa no protegida, pero con historia y elementos que quisieron conjugar con la historia de la cerveza, se dice que afuera había una piedra lisa que da nombre a la calle Cinco de Febrero conocida también como Calle de la Piedra Lisa”, explicó Miguel Hernández Roque.

Al llegar al museo lo primero que se puede observar es un mural realizado por la artista local Paulina Zermeño que representa parte de la fabricación y servicio de la cerveza, la obra está titulada “Fluidez Líquida”, y esto es solo la introducción a un paseo lleno de conocimiento y sabor.

“Se refiere a los amarillos de la manta, los verdes del lúpulo, el azul del agua, la parte del aire y el oxígeno con los que se oxigena la cerveza y también el servicio, la gente puede hacerse la foto del recuerdo en una representación de una botella de cerveza corriendo por un río”.

Al subir por las escaleras que conducen a las distintas salas del museo se encuentra un vitral en el que está San Arnulfo de Metz, conocido como el “santo patrono de la cerveza” del que se cuenta que logró multiplicar la cerveza para saciar la sed de todos en la edad media, donde era más sano tomar cerveza que agua debido a la contaminación de la misma.

De Irapuato para el mundo ¡Salud!

Irapuato a través de la historia tiene partes importantes en la fabricación pero también en la distribución de la cerveza, sin embargo el Museo de la Cerveza recorre miles de años antes la historia de esta bebida universal que se estima, ya era fabricada tres mil años antes de Cristo por los Sumerios.

En un recorrido por la línea del tiempo de la cerveza, en los pasillos del recinto se da un clavado a como desde los sumerios, egipcios, griegos y romanos tuvieron que ver en la historia de la cerveza.

“Recordemos que la cerveza tiene más de cinco mil años, tres mil años antes de Cristo, los sumerios ya elaboraban la cerveza, vamos a aprender la historia, datos interesantes, desde Alemania en La Baviera, hasta la parte de la nueva tendencia en cervezas artesanales”.

En la sala de la historia, hay un pedacito reservado para Irapuato, que también cuenta con su historia en la existencia de la cerveza.

“En 1863 se estableció el primer ejército francés, de esta invasión que tuvimos de la guerra de los pasteles, de hecho se establecieron en lo que ahora se conoce como San Antonio de Ayala, donde Pedro Dumas que era veterinario, pero en su función de herrar y curar caballos, aparte también elaboraba cerveza y enseñó a los locales a elaborarla y creó un importante mercado local y regional en la ciudad”.

Irapuato que tiene tantos productos característicos de sus propiedades en la tierra, en el clima y otros tantos, también hizo suya desde entonces la fabricación de la bebida que ahora une a tantos en convivencia, pero también en historia.

“En 1882 se establece la primera exposición industrial en Querétaro, el irapuatense Vicente Almanza inscribió su cerveza, una doble que ganó una medalla de segundo lugar en Irapuato”.

A partir de ahí también se establecieron fábricas de cerveza, la primera en 1922, “Rafael Barba y Compañía Sociedad de comandita simple”, relató Miguel Hernández Roque.

A lo largo y ancho del planeta, la fabricación de la cerveza tiene detalles característicos que se pueden conocer a fondo en esta sala de la historia, la primera receta de la cerveza, imágenes y documentos que constan el establecimiento de cerveceras en Irapuato es algo de lo mucho que el Museo de la Cerveza ofrece.

La cerveza se disfruta con todos los sentidos

Es común la creencia de que en cervezas solo están las claras y oscuras, dijo Miguel Hernández Roque, pero dispuestos a demostrar que existen amplias variedades, crearon la sala de los cinco sentidos que establece a la degustación de la cerveza como una experiencia multisensorial, del paladar, al olfato y hasta la vista.

“La realidad es que hay más de 140 estilos de cerveza, de hecho, cada uno tiene características propias, colores, desde los amarillos, los pajizos, naranjas, rosas, rojos, ámbar, café y oscuras, y aromas porque recordemos que tambien tienen aromas y sabores”.

En cada cerveza se encuentra toda una historia, con aportaciones multiculturales, con colores ligados a recuerdos o sabores que traen memorias, a lo largo del tiempo la industria de la cerveza ha crecido de manera exponencial.

Para hacer parte a las y los visitantes de la producción de la cerveza irapuatense Genaro Roque, cuentan también con una sala para demostrar parte de esta producción, de la industria, desde ollas hasta fermentadores

“Desde la parte del análisis del agua, todo este interesante proceso está aquí para que los conozcan, también hay dinámicas para que vengan, llenen su botella de cerveza y la cierren directamente con el encorcholatado, también invitamos a que formen parte de la elaboración”.

Y para terminar con el recorrido a través de la sala Genaro Roque, las y los visitantes volverán al principio donde podrán disfrutar de la cata de cerveza artesanal, para reafirmar todo lo que conocieron y disfrutar una nueva forma de beber cerveza.

Local

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En la barra del Museo de la Cerveza podrán degustar de los tres estilos de cerveza producida de la marca Genaro Roque, una clara american brown ale con notas a malta, cebada y miel, una intermedia pale ale inter con notas a malta, caramelo y cebada tostada y una oscura estilo inglés con notas a café.

Además, para adentrar a la experiencia en variedad, también cuentan con otros estilos de cervezas de Estados Unidos, Perú, y otras partes de Latinoamérica con estilos especializados, una american pale ale, tradicionales, oscuras y una dinámica donde en esta temporada se tendrá “lo más oscuro de la cerveza”

“En esta dinámica la titulamos así, no porque sea algo oculto, es para que conozcan los distintos tipos, porter, stout y american english pale ale”.