GUANAJUATO, Gto; ¿Qué pasaría por circunstancias de la vida sólo pudieras hablar susurrando o de lo contrario el riesgo de vivir sería fatal?
La obra de “Superpasito” va de una pareja que se encuentra en un lugar donde el susurro es la norma. Existe un peligro inminente y fatal al subir la voz. ¿Podrán coexistir bajo ese régimen? ¿Se atreverán a romper con las reglas de su entorno? ¿Qué puede revelar cada riesgo y cada transgresión? Se enfrentarán a esas preguntas entre la vida y la muerte, entre el amor y el odio, entre el silencio y la voz.
La compañía colombiana Espacio Escénica presentó ante los capitalinos la puesta en escena SuperPasito, obra que lleva por nombre una palabra colombiana en alusión a un sonido leve.
El montaje se desarrolla a partir de una pareja que se comunica entre susurros, de lo contrario el riesgo a vivir sería fatal; una reflexión sobre la realidad y la interferencia de terceras opiniones en la individualidad. La tuvo como peculiaridad que es presentada entre susurros, por lo que el público debe utilizar audífonos para una mejor experiencia.
Durante más de 70 minutos la obra te mantiene al filo de la butaca, gracias a la maravillosa actuación de Luna Baxter y bajo la actuación y dirección Julio Estallón, quien adapta esta obra de manera magistral.