A una semana de que el arroyo Santa Rita de Irapuato haya sido contaminado con hidrocarburo en su agua y sin ser limpiado por las autoridades, sigue generando malestares de salud en los habitantes de la zona.
El Dato...
El arroyo Santa Rita tiene una semana contaminado con huachicol
El pasado cuatro de diciembre los habitantes de la comunidad El Carrizalito reportaron a las autoridades municipales de un fuerte olor a combustible que emanaba del arroyo Santa Rita, donde también identificaron escurrimiento de hidrocarburo posiblemente proveniente de alguna toma clandestina, la situación les provocó a los pobladores malestares como dolor de cabeza y garganta, mareos y náuseas, principalmente a los niños.
Ha pasado una semana desde que fue detectado el combustible y que la empresa Petróleos Mexicanos (Pemex) se comprometió a acudir a limpiar la contaminación, los habitantes reportaron que continúan sufriendo de malestares, pues señalaron que pareciera ser que a las autoridades no les importa la salud de los habitantes ni la grave contaminación de la zona.
Agustina Montesino Oliva, quien vive justo a la orilla del arroyo, mencionó que las noches se han vuelto insoportables para ella y su familia, ya que el olor a combustible es mucho más penetrante, lo que les provoca dolores de cabeza y nauseas, pues dijo que a su hijo de cuatro años le aparecieron ronchas y constantemente se queja de dolor de cabeza.
Además, la habitante mencionó que evita que su hijo salga a jugar, ya que teme de pueda incendiarse el arroyo por alguna colilla de cigarro que suelen arrojar los automovilistas y las llamas lo alcancen, aseguró que a pesar de que han reportado la contaminación y la urgencia para que lo limpien.
“Nos esta perjudicado mucho esta contaminación, en la noche no se soporta el olor, nos duele la cabeza y se nos revuelve el estómago del aroma, a mi niño ya le salieron ronchas, ya ni lo dejo jugar afuera, porque alguien vaya a pasar y avienta una bachicha de cigarro, se prende y me lo agarra afuera, por lo mismo no lo dejo salir. Tenemos mucha preocupación de que nos vaya a pasar algo”.
El agua del arroyo sigue contaminada, pues aún puede observarse las machas aceitosas y amarillentas que flotan, donde todavía se percibe el olor a combustible; sin embargo, en la zona hay niños que están expuestos a sufrir alguna enfermedad, como David y José, quienes de ocho años de edad y viven a la orilla del río, mencionaron que llevan varios días percibiendo el penetrante olor, el cual también les ha causado dolor de cabeza y al resto de los niños que viven en el lugar.
A pesar de las quejas y reportes, Pemex no ha acudido a atender la contaminación, mientras tanto, los habitantes seguirán sufriendo por su salud y preocupados por su seguridad y la de sus familias.