El Obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, dijo que el plan antihuachicol presentado por el presidente Andrés Manuel López Obrador es un primer paso para eliminar la corrupción que hay en Petróleos Mexicanos, sin embargo dijo que aún se necesita trabajar más a fondo para acabar con el robo de hidrocarburo en el país.
“Desde hace mucho tiempo se estaba insistiendo con las autoridades que el huachicol no sólo tiene un aspecto, sino que tiene muchos aspectos y uno que no se quería enfrentar es que dentro de la misma Pemex se tenía que intervenir directamente en la corrupción que pueda haber,
“Si se está decidido a llegar a esto, está bien, pero no va a ser la solución sólo eso, porque es una cadena de muchas cosas y se tiene que insistir en todos los aspectos, desde el interior hasta el exterior, desde el que compra hasta el que vende, el que es intermediario, hasta el que se hace de la vista gorda, porque son muchos aspectos”, dijo el Obispo de Irapuato.
Enrique Díaz Díaz refirió que este problema tiene que ser enfrentado con mucha responsabilidad y no usarlo como pretexto para quitarse del camino a enemigos políticos.
“Qué bueno que no sólo en Pemex, sino en muchas instituciones se mire si hay corrupción, porque tenemos que enfrentar la corrupción, pero que tampoco sea pretexto para quitar a gente, enemigos o políticos que no nos caen bien”.
El pasado jueves, el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó el Plan Conjunto del Gobierno de México para Combatir el Robo de Hidrocarburo de Pemex, en donde fueron desplegados elementos del Ejército Mexicano a las refinerías del país para vigilar la salida de las pipas con hidrocarburo, así como también empezar a vigilar a funcionarios de la empresa productiva del estado que pudieran estar ligados al robo de hidrocarburo.
En el país fueron detectados 895 puntos de riesgo de robo de hidrocarburo, de los cuales más de 150 estaban en Guanajuato.