La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) hizo un llamado al Gobierno Federal a reconsiderar la iniciativa de regularización de automóviles de procedencia extranjera, pues consideró que eso significaría no sólo premiar a la ilegalidad, sino también advirtió que traerá graves consecuencias económicas, ambientales y hasta de seguridad con esta medida que aseguró no tiene nada de benéfica.
José Medina Mora Icaza, presidente de la Coparmex, explicó que han sido reiteradas las reformas legales o políticas públicas impulsadas en los últimos meses que resultan desalentadoras para la economía y el Estado de Derecho y señaló que a ellas se suma el reciente anuncio del titular del Ejecutivo federal, quien ha planteado regularizar los autos ilegales. Eso implicaría, dijo, legalizar el contrabando y fomentar la competencia desleal en una industria estratégica para México y gravemente afectada por la pandemia como lo es la automotriz.
De acuerdo con datos de la Coparmex, en el mercado nacional se vendieron 428 mil 312 vehículos ligeros durante enero y mayo 2021, esto está 19.8% por debajo de los niveles registrados en enero-mayo 2019. La producción total de vehículos ligeros está 19.7% por debajo de los niveles vistos en el mismo periodo previo a la pandemia.
Además, la Coparmex alertó que aunado a ello se podrían desencadenar un sin fin de riesgos e impactos que se podrían provocar como la perdida de empleos, caída en la recaudación, esto quiere decir que los fabricantes dejarían de pagar IVA e ISR ante los recortes en la producción que tendrían que hacer por una menor demanda de autos nacionales y habría una considerable reducción en la captación del impuesto que los compradores de vehículos nuevos tienen que pagar; este concepto por si solo recaudó 11 millones de pesos el año pasado.
Con ello sin contar las graves afectaciones al ambiente como en algunas zonas metropolitanas, las emisiones generadas por vehículos representan hasta un 60% de la contaminación total por partículas suspendidas gruesas y, lo más grave, es que de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) cada año mueren en el país 14 mil 700 personas a causa de enfermedades asociadas a la contaminación.
Además, los empresarios alertaron que al constituir una actividad ilegal, no se cuenta con estimaciones acertadas que ayuden a dimensionar el universo de este tipo de vehículos. Sin embargo, muchos de ellos al ser vehículos desechados o con antecedentes de siniestro en Estados Unidos no garantizan los estándares mínimos de seguridad vehicular como son frenos de seguridad ABS, bolsas de aire o sistemas de retención infantil y con ello se pone en riesgo a los usuarios del auto como a las personas en su entorno.