Irapuato, Gto. (OEM).- El primero de noviembre, según la cultura mexicana, es la fecha en la que se tiene la creencia de que todas las niñas, niños y nonatos difuntos visitan el mundo de los vivos para ver a sus seres queridos.
Por ello, cientos de familias asistieron a las instalaciones del Panteón Municipal para arreglar las tumbas de sus pequeños familiares.
Desde muy temprano, el Panteón Municipal se llenó de cientos de familias que, con flores, juguetes y todo lo necesario para arreglar las tumbas de aquellos pequeños que perdieron la vida en distintas circunstancias.
El área de las gavetas murales dedicadas a niñas, niños y nonatos estaba repleta de flores, música y se percibía la tristeza por recordar los buenos tiempos en los que aún se encontraban vivos, como fue el caso de la familia de la pequeña Sanjuanita, quien murió en el vientre de su madre.
“Le doy gracias a Dios que me siga dando licencia para poder venir a visitarla, ya va a cumplir 15 años desde que falleció, la esperábamos con mucho amor y cariño, pero Dios decidió llevársela; soy su abuelita y me da mucho pesar por todo lo que sucedió, pero aún seguimos viniendo a verla; es realmente importante venir a recordar a nuestros familiares y no permitir que se queden en el olvido”, dijo Beatriz Leticia Vallejo, abuela de la pequeña Sanjuanita.
Comentó que año con año desde su muerte, asisten al Panteón Municipal caminando desde su hogar, que se ubica cerca del puente de Guadalupe.
Por su parte la señora Juana Méndez Hernández, quien iba acompañada de sus padres y sus dos hijas, comentaron que también se encontraban visitando a su hija Guadalupe, quien por complicaciones en el parto no pudo sobrevivir.
“Hace 21 años perdí a mi hija, murió en mi vientre, yo la esperaba con mucha emoción y hoy que recuerdo esto es muy bonito, pero me es muy difícil, aunque como dice mi mamá: Dios nos da a nuestros hijos y él también decide cuándo llevárselos; me entristece, porque yo no pude asistir a su entierro, debido a que me puse muy mal de salud y me pusieron en cuidados intensivos, pero hoy ya puedo venir a verla”.
➡ Suscríbete a nuestra edición digital