Preocupa a Iglesia que violencia manche elecciones en el país

Varios aspectos que deben cambiar y reconocer que la violencia, por más desagradable que parezca, es algo que obliga a cuestionar qué se ha hecho mal

Fátima Arton/ El Sol de Irapuato

  · domingo 11 de febrero de 2024

Preocupa a iglesia violencia / El Sol de Irapuato

Irapuato, Gto. El Obispo de la diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, mencionó que después de la violencia que se ha registrado últimamente con los políticos y aspirantes a la elección en el país, da la impresión de que es un proceso sangriento, tema que preocupa y lastima, siendo necesario que se haga una reflexión sobre esta problemática.

El pasado sábado 10 de febrero, en Ecatepec, Ciudad de México, fue encontrado sin vida a Yair Martín, quien era aspirante a diputado federal del Distrito 16 de Ecatepec y Tlalnepantla por Morena, siendo este uno de los ya muchos en los que se ha tentado con la vida de más políticos y aspirantes.

Han sido varios los candidatos o familiares de políticos que esta semana fueron asesinados, parecería que es un proceso bañado en sangre, esto nos preocupa y nos duele porque parecería que en busca del poder se va suprimiendo el valor de las personas, ojalá que sea una reflexión muy seria y profunda, tanto de candidatos como cada uno de los ciudadanos”.

Explicó que, recientemente se dio a conocer una propuesta en la que sugería que a todos los políticos y aspirantes que estuviera en peligro se les diera un acompañamiento, esperando que esto no llegue a afectar a la seguridad que se le debe de brindar a todas y todos los ciudadanos

“Escuché la propuesta de que a cada candidato, según el grado de peligro, se le iban a poner algún cuidado especial, pero esto a cuántos candidatos se le va a poder dar esta protección y a cuantos ciudadanos se les puede brindar una verdadera protección”.

Aseguró que hay varios aspectos que deben cambiar y reconocer que la violencia, por más desagradable que parezca, es algo que obliga a cuestionar qué se ha hecho mal.

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“Hay muchas cosas que cambiar y la violencia nos tiene que seguir cuestionando muy profundamente en qué hemos fallado como sociedad, como iglesia, como escuela y como familia, tendremos que seguir trabajando mucho por esa búsqueda de paz”.