El pan de muerto es uno de los alimentos más populares en todo México durante estas fechas, pero también tiene mucho significado para los mexicanos porque es una pieza esencial para el tradicional Altar de Muertos que es dedicado a los seres queridos que han fallecido.

El Dato..

El pan de Muerto representa el ciclo de la vida y la muerte, simboliza al esqueleto y a las deidades Tezcatlipoca, Tláloc, Quetzalcóatl y Xipetotec.

El origen del pan de muerto data desde la época prehispánica usado en los rituales de sacrificio, donde elaboraban un pan con amaranto y este era bañado con sangre del corazón de las persona, el cual era ofrecido a Huehuetéotl, Dios del Fuego.

Sin embargo, cuando sucedió la Conquista, los españoles rechazaron estas prácticas y obligaron a los habitantes a abandonar los sacrificios, por lo que el pan bañado en sangre fue sustituido por la elaboración del pan de trigo en forma de corazón, cubierto de azúcar color roja simbolizando la sangre de los sacrificios que solían hacer, entonces de así surgió el popular pan de muerto, pero por el paso de los años, su proceso y forma ha ido cambiando hasta adoptarlo a como comúnmente lo conocemos, redondo con una bola al centro y cuatro pequeñas hileras de piezas a su alrededor.

Cada pieza o forma del pan tiene su significado: el pan que es de forma circular, representa el ciclo de la vida y la muerte; la bola colocada al centro, figura al cráneo del muerto; las cuatro tiras de los lados simbolizan a los huesos y también hacen referencia a los cuatro puntos cardinales, los cuales representan a las deidades Tezcatlipoca, Tlaloc, Quetzalcóatl y Xipetotec.

El Pan de Muerto ha sido durante siglos una pieza importante para el Día de Muertos, porque hasta la fecha no ha dejado de adornar el Altar de Muertos ni ha dejado de estar en la mesa de las familias, también es la época en la que los panaderos pueden incrementar sus ventas por su elaboración y demanda, así como los restauranteros pueden volverse creativos para incorporarlos a su menú.

Décadas dedicado a la elaboración del Pan de Muerto

Juan Carlos Reyes, quien tiene 32 años dedicándose a su panadería, no sólo elabora las comunes conchas, orejas y cuernitos, sino que cada año realiza el tradicional Pan de Muerto, ya que tiene gran demanda durante estas fechas, porque a todas horas del día acuden las personas a buscar el delicioso pan para acompañarlo con leche, chocolate caliente o café, y también para colocarlo en su altar dedicado a sus difuntos.

El pan de muerto de Juan Carlos está elaborado de anís, aunque también los hay de otros sabores como naranja y hasta rellenos de chocolate, comentó que la elaboración del pan inicia a partir de la seis de la mañana, donde ocho panaderos se dedican a mezclar la harina, huevo, leche, mantequilla, anís y azúcar, para después amasarlo y comenzar a hacer la conocida forma del pan.

Posteriormente, el pan es colocado en charolas y la cocción en el horno dura cerca de 10 minutos, en total salen 34 charolas en ese lapso de tiempo, después le ponen azúcar o ajonjolí como último toque, para que finalmente pueda ser degustado por las personas.

“El pan queda muy rico, al día hacemos hasta cinco mil piezas de pan al día, porque tenemos mucha demanda en estos días, las personas ya nos conocen y saben la calidad y sabor del pan de muerto.