Durante cinco meses fueron adoptados 11 niños en Irapuato por familias de Nuevo León, Celaya y Cuernavaca; sin embargo, las adopciones son pocas para los cerca de 60 niños que aún esperan formar parte de una familia y reintegrarse a la sociedad.
El Dato...
Hay jóvenes de hasta 22 años que siguen viviendo en la Villa Infantil porque nunca fueron adoptados
11 de los niños que están bajo el resguardo del Sistema DIF fueron adoptados en el periodo de agosto a diciembre, través de seis procesos, donde dos hermanos fueron adoptados por una pareja de Cuernavaca, un niño de tres años por una pareja de Celaya y un niño de nueve años por una mamá soltera, así como tres hermanos de tres, cinco y nueve años de edad fueron adoptados por una pareja de Nuevo León, los cuales tuvieron la oportunidad de integrarse al núcleo familiar y continuar con su desarrollo.
Sin embargo, aún tiene alrededor de 60 niños bajo su resguardo, debido a que no pueden estar con sus familias, porque fueron victimas de violencia y maltrato, así como también están en estado de orfandad porque sus padres fueron asesinados y no hay quien pueda cuidarlos.
De acuerdo con el Sistema DIF los niños que son mayores de 12 años tienen más complicaciones para ser adoptados, debido a que las familias prefieren a niños pequeños para que no sea difícil su adaptación al núcleo familiar.
En la Villa Infantil de Irapuato hay cerca de 25 niños y jóvenes de entre seis y 22 años de edad, los ingresos continúan y han incrementado hasta 40% por lo altos índices de homicidios dolosos que se han estado suscitando; a pesar de ello, las adopciones siguen bajando.
Laura Martínez de la Mora, directora de la Villa Infantil, lugar a donde envían algunos de estos niños, mencionó que la gran mayoría de los menores que están bajo su resguardo difícilmente tienen una persona o familia que pueda hacerse cargo de ellos, por lo que pueden ser adoptados por alguna familia.
Sin embargo, señaló que son pocos los niños que tienen la oportunidad de ser adoptados, debido a que los procesos son complicados y es deficiente la cultura de adopción en México, principalmente cuando tienen más de 12 años.
“Las familias se llevan a niños muy pequeños, menores de siete años y hasta bebecitos, porque es más fácil su crianza, a pesar de que los requisitos sean los mismos que con los niños de hasta 14 años. Nosotros hemos dado adopciones a España, Uruguay y hasta Estados Unidos que se han llevado a niños de 13 años, pero aquí en México es muy poca la cultura de adopción”.
Desarrollarán un programa para jóvenes que no fueron adoptados
La directora de la Villa Infantil comentó están buscando desarrollar el programa Área de Vida Independiente, para aquellos jóvenes que llegan a los 15 años y no tuvieron la oportunidad de formar parte de una familia.
El Dato...
En 5 meses adoptaron a 11 niños, a pesar de ello, siguen siendo pocos para la cantidad de niños en orfandad
“Como no hay cultura de la adopción, queremos ser pioneros en empezar los programas de acogimiento familiar para que los niños no estén lejos de un núcleo familiar, pero si no quieren formar parte de una familia y están por llegar a ser mayores de edad, también pueden formar parte del programa de Vida Independiente”.
El programa de Vida Independiente consiste en ofrecerle un espacio a los jóvenes, mientras aprenden a valerse por sí mismos, a cocinar, a hacer las tareas del hogar y a ser responsables mientras estudian o trabajan, para que en un futuro puedan asegurar tener un hogar y un trabajo, a pesar de no tener mamá ni papá.
“No queremos soltarlos a la calle y que sean vulnerables, a pesar de que no fueron adoptados, queremos que se preparen para su futuro, que tengan una mejor vida, que aprendan a vivir y desarrollarse sin estar institucionalizados”.
16 años viviendo en la Villa Infantil
Uno de los chicos más grandes de la Villa Infantil llegó a los seis años de edad, debido a que fue victima de violencia y quedó en orfandad, actualmente tiene 22 años y continúa viviendo en el mismo lugar donde creció, convivió con más niños en la misma situación, donde recibió educación, alimento y cuidados.
El joven nunca fue adoptado por una familia, siguió creciendo y desarrollándose, a pesar de ser de entre los más grandes y mayor de edad, sigue conviviendo con los más pequeños y con otros chicos casi de su edad que están en la misma situación.
Sin embargo, ahora puede trabajas y se puede pagar su universidad, donde esta estudiando la licenciatura en Contabilidad, para que en un futuro no muy lejano, pueda tener un trabajo digno, tenga la capacidad de tener su propio hogar y poder formar su propia familia.