El obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, aseguró que si bien el futbol y el deporte son un escaparate para un gran sector de la población, el que al Club Deportivo Irapuato no se le haya permitido el ascenso no debe verse como que el mundo se acabó por ello.

Esto, luego de que la Federación Mexicana de Futbol no diera su aval para que el Club Deportivo Irapuato pudiera jugar en la Liga de Expansión MX, supuestamente por un tema de solvencia financiera por parte de la directiva del equipo fresero, el obispo de la Diócesis de Irapuato dijo que el futbol tiene que verse sí como una parte integral de la persona, pero no como algo fundamental o primordial para ésta.

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“Yo creo que ayuda y es una fuente de ingresos, pero ni se acaba el mundo ni debemos dar todo a este evento, pero sí es muy importante para mucha gente y no comprende que se gane en el juego y que se pierda en la mesa, pero no estoy tan claro en las decisiones ni en esto que ha sucedido”.

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“No podemos decir que el deporte no sea importante, también tiene un su importancia, porque si nos enfocamos en sólo una cosa perdemos el sentido de la persona”

Enrique Díaz Díaz | Obispo de la Diócesis de Irapuato

Enrique Díaz Díaz dijo que así como se pone énfasis en el futbol también se debe poner en otras situaciones también importantes como la salud, la educación para con ello lograr un bienestar completo para las personas.

“Necesitamos ver a la persona integral, no podemos decir que el deporte no sea importante, también tiene un su importancia, porque si nos enfocamos en sólo una cosa perdemos el sentido de la persona, también tendría que verse el futbol, pero sin descuidar lo primordial que es el bienestar de la persona y la sociedad”.