Mujeres trans también sufren de violencia y discriminación, como en el caso de Grecia y Fernanda, dos mujeres trans quienes denunciaron que fueron despedidas de sus trabajos por el simple hecho de su identidad de género; mencionaron que falta que la sociedad se informe en tema de inclusión y que no piden apoyo sino respeto.
Grecia Rodríguez, narró cómo fue su experiencia ante la discriminación laboral que sufrió hace poco, fue discriminada en la empresa en la que trabajaba, junto a su amiga y compañera Fernanda Honesto, discriminación que comenzó al no permitirle usar los baños porque la identificaban como un hombre.
“El problema fue porque fuimos contratadas hace poco, no habíamos tenido ningún problema hasta que uno de los guardias de seguridad que trabajaba en planta, tuvo una discusión con una compañera mía que también es una chica trans, diciéndole que no podía ingresar al baño de mujeres porque él la identificó como hombre”.
“Después de eso, nos dijeron que iban a tratar este tema a profundidad, nos descansaron dos días para investigar cuál era el problema, nos mandaron a otra planta y nos comentaron que ya podíamos ingresar a trabajar hasta que volvió a haber problemas con mi amiga que quería entrar al baño, el guardia de seguridad le dijo de nuevo que no podía entrar porque era un hombre y hasta le dijo que le iba a quitar sus credenciales”.
Grecia Rodríguez aseguró que desde un inicio, al ser contratadas, ellas fueron claras con su identidad de género, lo cual al inicio parecían respetar, hasta que los guardias de seguridad no les permitieron ingresar a espacios dentro de la empresa por incomodidad.
“Cuando fuimos contratadas, desde el inicio nos identificamos como mujeres trans y aceptaron nuestro contrato, al entrar fuimos muy claras, lo único que les pedía era una solución”.
Contó que la única solución que se les presentó fue que su contrato fuera anulado y se le pagara lo equivalente a sus días trabajados, ya que no podrían ingresar a ningún baño sin incomodar a sus compañeras y compañeros de trabajo.
“La supervisora nos dijo que teníamos que saliros de la planta debido a que no podíamos hacer uso del baño de mujeres por ser hombres y que no podíamos ingresar al baño de hombres vestidas de este modo porque íbamos a sufrir de discriminación, la solución que nos dieron fue desicionar el contrato y darnos nuestra liquidación”.
Grecia concluyó pidiéndole a la gente que se les respete como a cualquiera, que en realidad el apoyo no es algo que necesiten, solo respeto.
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“Yo creo que la sociedad necesita un poco más de educación, muchas personas dicen que nos apoyan, pero lo que nosotras pedimos no es apoyo, es respeto, como se respeta a cualquier otro ser humano, sin importar su identidad de género”.