El municipio en conjunto con el Estado, apoyaron de manera personalizada con becas a 220 niñas y niños de la comisión Estatal de Víctimas quienes perdieron a sus tutores debido al crimen organizado, así lo explicó Joyce Guerrero Barajas, Directora de Educación de Irapuato.

“Dimos una atención personalizada y de acompañamiento a las solicitudes de los colectivos de búsqueda de desaparecidos, tenemos 220 niños que serán beneficiados en calidad de víctimas, a través de la comisión estatal de víctimas”.

Así es el caso de la familia de María Teresa Marmolejo del colectivo Hasta Encontrarte, abuela de dos jóvenes, los cuales ha cuidado desde que encontró muerta a su hija.

Como es el caso de la señora María Teresa Marmolejo, quien pertenece al colectivo Hasta Encontrarte, perdió a su hija y actualmente se ha dedicado a cuidar de sus dos nietos.

“En el 2020 a mi hija se la llevaron el 16 de julio y la encontré el 27 de agosto, hasta ahora tengo cuatro años cuidando a mis nietos, uno que va a entrar a la secundaria y otro a la preparatoria”.

“Para mi es mucha ayuda porque les puedo comprar los uniformes y sus útiles escolares, entré al apoyo de las becas por medio del colectivo hasta encontrarte, me da gusto porque ambos fueron seleccionados”.

Expresó que en lo personal, el que hayan apoyos de este tipo para las personas que realmente lo necesitan es de suma importancia, debido a que en muchas ocasiones el dinero solo llega a personas sin necesidad.

Mencionó que en lugar de tener estas becas para sus nietos preferiría tener con vida a su hija, pero al saber que nada ni nadie se la podrá regresar, ha aprovechado la ayuda para que sus nietos puedan seguir con sus vidas a pesar de lo complejo que pueda llegar a ser.

“Preferiría mil veces tener a mi hija que el tener esta ayuda, pero ya nada ni nada me la va a regresar, entonces para mí el que les hayan dado a ambos la beca es una oportunidad de seguir adelante con sus estudios y sus vidas”.

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_{Dio a conocer que el proceso para solicitar las becas} fue un poco difícil por todo el papeleo que debía hacer, pero gracias al colectivo de búsqueda al que pertenece, ella y más de sus compañeras que cuidan de algún menor de edad que haya perdido a sus padres.

“Una no se fija en la cantidad sino en el apoyo, porque es para el beneficio de las y los niños; la verdad costó un poco de trabajo, porque piden muchos requisitos y a veces son documentos que no los puedes conseguir al momento, pero gracias al colectivo varias compañeras pudimos entrar, somos un colectivo unido”.