Los famosos “Olleros” de Irapuato

Un negocio de tradición en la ciudad que lleva más de 60 años

Paul Witrago R | El Sol de Irapuato

  · martes 6 de febrero de 2024

Doña Cristina Jasso muestra las ollas de barro a los clientes, una tradición de más de 65 años / Fotos: Paul Witrago | El Sol de Irapuato

Irapuato, Gto. Las ollas de barro, ahora ya no solo se utilizan únicamente para cocinar en leña, sino que hoy en día las personas las han adaptado para que sean utilizadas también en estufas de gas.

Ulises Núñez Jasso, uno de los herederos de este negocio de tradición a quien, en Irapuato, comentó que su abuela Flora Díaz (+) y el señor Juan Núñez Díaz (+) y su esposa Cristina Jasso García emprendieron el negocio de las Ollas de Barro hace más de 65 años.

Actualmente, el negocio de las ollas de barro está a cargo de la señora Cristina Jasso, además de sus hijos y nietos, quienes se han incorporado a la tradición de familia con más de 60 años, y este se ubica en el boulevard Díaz Ordaz.

El negocio de esta familia hoy en día es considerado como un ícono de Irapuato, porque así lo ha señalado la ciudadanía irapuatense quienes siempre han dado una referencia con esta frase “Por los Olleros” con los “Olleros” ahí los venden con los “Olleros”, y sabemos que por tradición las personas han expresado esta buena fama que nos han dado durante décadas.

En entrevista para el Sol de Irapuato, uno de sus hijos, Ulises Núñez Jasso, comentó que este negocio ya lleva 4 generaciones desde que la inicio su abuela y su señor padre, quienes llegaron a Irapuato alrededor de los años 60´s, y quienes provenían del estado de Michoacán.

Cuando iniciaron el negocio Doña Flora y Don Juan Núñez, ambos trabajaban el barro, por lo que ellos mismos laboraban las ollas y cazuelas, posteriormente al ir progresando el negocio se dio la oportunidad de contratar a otra persona para que les ayudara trabajar el barro y el negocio siguió por buen camino y entonces se pasó a tener más trabajadores propios.

Hoy en día todas las artesanías con que cuenta el negocio de la familia Núñez Jasso, todo proviene de diferentes partes de la República Mexicana, de Michoacán, México, Guanajuato, Monterrey, Oaxaca, de donde proviene el barro negro, entre otras partes.

Ahora también en este negocio se ofrece a los clientes otra variedad de artesanías elaboradas con materiales de cerámica, de yeso, herrería y de cobre, pero la gente siempre busca en la mayoría de las veces las de barro, por sus características que tiene a la hora de cocinar en ellos.

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Al pasar de tiempo, Doña Cristina Jasso, exmaestra de la escuela 20 de noviembre, continua en el negocio mostrando cada día la mercancía a los clientes y siempre con la amabilidad que la ha caracterizado en todos estos años.