El Obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, dijo que aunque Guanajuato esté cerca de llegar a color verde en el semáforo estatal epidemiológico no significa que la pandemia haya acabado y dijo que es fundamental evitar eventos multitudinarios, ya que estos representarían un nuevo repunte de contagios y muertes por coronavirus.
Señaló que de ninguna manera se podrá volver a la normalidad que se tenía antes de la crisis sanitaria, sino que más bien es una nueva realidad a la que de una vez por todas el grueso de la población debe adaptarse y dijo que se cometería un nuevo error si la gente omite las medidas sanitarias.
“Debemos tener conciencia todos y no solo en los eventos religiosos de que la pandemia ha llegado para quedarse y que necesitamos ser concientes de que seguiremos en peligro y que tenemos que usar las protecciones sanitarias que nos proponen las autoridades”.
Enrique Díaz Díaz dijo que la pandemia de coronavirus llegó para quedarse y considera que en todo el país se está cometiendo el error de la realización de eventos multitudinarios que en dado momento podrían representar un nuevo confinamiento como el que se tuvo hace unos meses por el repunte de casos.
Manifestó que la ciudadanía debe asumir la pandemia con responsabilidad, pues si bien tienen el deseo de volver a la vida de antes de la contingencia sanitaria, por el momento no es posible y dijo que la población debe tener paciencia y ser consciente para no poner en peligro la vida de los mas vulnerables.
Expresó que las fiestas decembrinas también deberán llevarse a cabo con responsabilidad y dijo que debe evitarse aglomeración de personas y esperar a que se mejoren las condiciones sanitarias.
“En general yo he visto en los templos, en las celebraciones bastante responsabilidad, ojalá que si esto se da porque apenas decía que era una posibilidad que pudieramos vivirlo de una manera responsable, estos eventos y estas fiestas decembrinas que por otro lado nos ayudan a convivir y a sentirnos menos solos”.