La sacrificada profesión de ser bombero

IRAPUATO, GTO. Para que un bombero desempeñe correctamente su trabajo requiere de valentía, disciplina, compañerismo y calidez humana, características que conforman al Cuerpo de Bomberos de Irapuato.

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40 bomberos asalariados y 60 voluntarios, son los que forman parte del Cuerpo de Bomberos, quienes siempre están al pendiente para atender cualquier emergencia como incendios en hogares, en baldíos, choques y explosiones, sea donde sea, ellos siempre aparecen para salvaguardar la seguridad de los ciudadanos.

Los bomberos trabajan los 365 días del año durante las 24 horas del día, por lo que son “héroes sin capa” y son la inspiración de cientos de niños que “cuando sean grandes” serán bomberos, porque son un ejemplo para la sociedad.

El compañerismo los caracteriza, porque ellos más que nadie saben trabajar en equipo, unos apagan el fuego, algunos controlan las bombas de agua y otros mantienen la seguridad de las personas, pues entre todos se ayudan al momento de atender una emergencia.

Las personas saben que al ver a una persona con su traje color amarillo y lleno de hollín, no esta viendo sólo a un bombero, sino a un héroe que siempre estará dispuesto a ayudar, a pesar del cansancio, de no haber comido, de entrar a lugares peligrosos y combatir las llamas, ellos siempre estarán disponibles para servir a la comunidad.

A diario atienden, por lo menos, una emergencia, en cuestión de segundos se colocan sus trajes amarillos, las botas, sus cascos, para subir de inmediato al camión y abrirse para entre los cientos de automóviles que transitan en Irapuato, en el transcurso sus luces están encendidas y suena ese sonido que los caracteriza y llama la atención de las personas seguido de un “mira, ahí van los bomberos”, van lo más rápido que pueden a atender una emergencia, por más sencilla que sea, pues sólo ellos saben que un segundo vale mucho, incluso una vida.

Por ello, los bomberos merecen el reconocimiento por su valentía y por su servicio, porque no todos tienen la vocación, el esfuerzo, la energía ni esa calidez humana que tanto los distingue.