La ropa típica del Estado de Oaxaca es bastante variada y algunas de estas prendas estarán disponibles en la plaza Don Bosco, donde Kevin, un joven originario de este estado se dedica a venderlas continuando con una tradición familiar.

➡ Suscríbete a nuestra edición digital

“Nosotros traemos nuestros productos traídos desde el Estado de Oaxaca, vendemos guayaberas hechas de lino, estas son prendas conocidas por ser de gala y son usadas para eventos importantes y también manejamos las que están hechas de manta de algodón, esta se puede usar para diario”.

“Nosotros las fabricamos dependiendo el diseño, empezamos por cortar la tela en distintas tallas, nos tardamos aproximadamente en hacerlas tres días, cada 22 días cambiamos diseños”.

“Este es un trabajo familiar, en lo que unos las produce, nosotros las vamos vendiendo, mi papá fue quien me enseñó ya que lleva en esto más de 10 años y yo llevo relativamente poco aprendiendo del negocio”.

“En la ropa para mujer manejamos el hilo de seda y el hilo de algodón, la tela también es de lino siendo una prenda que no encoge y no se le va el color, los vestidos que son 100% de algodón, algunos de los bordados que se ven en la ropa son hechos a máquina teniendo un precio más económico a comparación de los que se hacen a mano”.

El señor Javier, también ha dedicado su vida entera a la venta de prendas artesanales junto con sus hijas que desde pequeñas también aprendieron a tejer para continuar.

Lee también: Disfrutan familias irapuatenses aniversario del inicio de la lucha por la independencia

“Yo soy de la Sierra Sur de Oaxaca y tengo toda la vida vendiendo ropa de mi estado, ya que es un trabajo que me heredó mi papá, las prendas que yo vendo se hacen con la técnica del telar de cintura, la cual tratamos de que siga presente ya que es una de las dos técnicas prehispánicas que siguen vigentes hasta la fecha, esta se realiza entrelazando hilo por hilo, el diseño puede variar al igual que los colores que se usan, decimos que es un reflejo de los sentimientos de quienes los fabrican y este proceso puede tardar más o menos de tres a cuatro días por prenda”.

“Nuestra intención es que la gente aprecie la cultura de Oaxaca y que no se pierdan los bordados y tejidos, pero a veces la gente prefiere comprar prendas más baratas y son cosas que ya están industrializadas y las que vendemos nosotros son únicas”.
“Tengo dos niñas, las cuales comenzaron desde pequeñas a aprender a tejer y ahorita que ya están más grandes hacen trabajos más detallados”.