En México, la integración de la Guardia Nacional a la Secretaria de la Defensa Nacional (Sedena) no es la solución a la violencia que se vive en el país y más si no hay una organización en cuanto a tareas por hacer.
David Saucedo Torres, consultor y asesor en seguridad pública, dijo en entrevista con Organización Editorial Mexicana que no se ha dejado madurar el trabajo de la Guardia Nacional, por lo que no se ha logrado dar los resultados que la ciudadanía necesita, por ello es que la perspectiva de esta es que sólo sirven como un acompañamiento no una resolución al problema.
“Lo que hemos visto por parte de la Guardia Nacional, o lo que hace son operativos de presencia disuasiva, pues lo que realiza son rondines, lo único que hace es una labor de acompañamiento a las Fiscalías estatales, o a las Policías estatales, pero realizan pocas tareas de investigación y desarticulación de redes criminales, es más no podemos decir que haya un desempeño de la Guardia Nacional que sea efectivo, sino todo lo contrario”, dijo.
El experto también dijo, que si se busca un organismo que le sea funcional al país, tendrían que esperar alrededor de diez años para que logre madurar la corporación y esta le sea útil a la ciudadanía.
“La creación de una nueva institución dedicada a la seguridad pública tiene cuando menos un horizonte de tiempo y de maduración de cuando menos diez años, pues estamos hablando de que se tienen que formar elementos de seguridad pública de al menos cuatros años, después otro tanto de años en trabajo en campo para que adquieran la experiencia en el terreno para que puedan con el combate a la inseguridad, y le agregamos la capacitación de armamento, nuevas tecnologías, por que si no hay esta capacitación es como si le pidieras a un doctor general que haga una operación a corazón abierto, la va a poder hacer, pero necesita especializarse”, dijo.
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Agregó que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha fallado en la estrategia de seguridad, pues no se ha priorizado las capacidades de las policías municipales y estatales para que los militares se concentren en sus actividades de disciplina militar, y mientras no haya capacitación no habrá solución a ningún problema de seguridad.