Juan José Segoviano Sánchez, el elemento de la Policía Municipal que fue privado de la vida el pasado sábado en la comunidad San Roque, fue velado este lunes en su casa y en donde familiares y conocidos continúan indignados por la agresión de la que fue objeto.
Y es que Juan José, a sus 32 años, venía de una familia humilde y trabajadora de la zona. Llegó a las fuerzas policiales municipales hacía dos años y 10 meses en busca de mejores condiciones laborales para sacar adelante a su familia.
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“Antes de entrar a la policía trabajaba en otro municipio, desplazarse hasta allá era pesado y complicado, en busca de mejores condiciones entró a la Policía Municipal”, relató su padre.
Ahora en la familia Segoviano Sánchez quedó un enorme vacío, la tristeza e impotencia de no poder haber hecho nada para salvar su vida después de ser atacado, un padre que tuvo que ver a su hijo morir y una niña de apenas nueve años de edad que ha quedado en la orfandad.
Ya al mediodía del lunes, el cuerpo de Juan José se encontraba en la cochera de su casa, a la cual no pudo entrar aquel sábado, pues a manos de personas aún no identificadas perdió la vida; sobre las investigaciones poco se sabe aún.
Como fue informado por El Sol de Irapuato, el elemento policial fue agredido la noche del pasado 12 de noviembre cuando estaba por entrar a su vivienda; pese al gran operativo conjunto realizado después de lo ocurrido, no hubo personas detenidas.
Cientos de flores en ramos y arreglos rodeaban el féretro, al frente fue colocada una gran fotografía que mostraba el rostro sonriente de quien según quienes le conocían sólo buscaba lo mejor para su familia y su comunidad, aunque el silencio inundaba el lugar, las miradas de los presentes decían todo lo que había que decir.
“Poco después de que empezó a trabajar pudo comprar su moto para ir a trabajar, todo lo que tenía le costó tanto esfuerzo”.
El cuerpo fue velado todo el lunes y este martes será la ceremonia religiosa para después ser llevado a su última morada.
Juan José es el sexto Policía Municipal asesinado durante el año 2022, y fue el uniformado número 46 en ser privado de la vida en el estado de Guanajuato.