"Lloró la Virgen de los dolores", feligreses celebraron el viernes de dolores en Irapuato, precisamente el templo de Nuestra Señora de los Dolores fue el punto reunión.
En las calles de la colonia Santa Julia, desde el año 49 según recordaron vecinas, se lleva a cabo este festejo en el templo, el cual entonces era solo una construcción de puro ladrillo sin detalles, desde entonces la fe los ha llevado a recordar el dolor que sufrió la virgen al ver como llevaban a su hijo al calvario.
Ma Soledad Vargas es una de las participantes en la preparación de la tradicional agua de ensalada qué se reparte entre todos los que asisten al templo en los Viernes de Dolores en símbolo a las lágrimas que derramó la virgen.
Como es tradición creyentes católicos acostumbran dar agua o hasta nieve a quienes pasen por esta tradicional celebración que ha pasado de generación en generación, al medio día se llevó a cabo una misa en el mismo templo que tuvo el mensaje de recuperar los valores, la familia y encomendarse a Dios para tener una sociedad cada día mejor.
Soledad Vargas señaló que los Viernes de Dolores los ve en el sufrimiento de cada madre que a lo largo de los años ha perdido a un hijo, el dolor que sufrió la virgen se réplica por dinero o poder, por lo que cada año pide a Dios que regrese la humanidad a los corazones de la gente.
"Hoy recordamos el encuentro que ella sufrió al ver a su hijo, que como un vil ladrón lo crucificaron, esto se réplica entre hermanos en la actualidad, acusan a gente, queremos hacer un llamado a que nos humanicemos más, dejar de ver al prójimo como un enemigo o un signo de pesos, porque las mentes poderosas apoyan guerras pero no van, ahí mueren los hijos de muchas madres que han sufrido lo que la Virgen sufrió".
Creyentes vivieron y recordaron aquel dolor y oraron para que todas las madres encuentren paz y que el sufrimiento de la virgen no se siga reflejando en otras familias de la sociedad.
Soledad explicó que cada año se juntan varias personas para preparar el agua de ensalada para repartir la cual es una combinación de beta el, lechuga, plátano y naranjas.
Recordó que desde muy joven veía como otras señoras que ya no están en este plano terrenal se encargaban de compartir esta tradición la cual espera que se siga transmitiendo a más generaciones.