Inician ventas de flor de cempasúchil

Son las más solicitadas por los ciudadanos para llevar a sus difuntos

Karla Aguilera Rangel

  · lunes 8 de octubre de 2018

La flor de cempasúchil se caracteriza por su intenso color amarillo y hasta anaranjado. / Fotos: Víctor Cruz / Sol de Irapuato.

IRAPUATO, Gto.- La venta de flores de cempasúchil comenzó durante la temporada del Día de Muertos, ya que son las más solicitadas por los ciudadanos para llevar a sus difuntos, para el tradicional altar de muertos e incluso para decorar sus hogares.

Por ello, los floricultores se preparan desde meses antes para recibir altas ventas en esta temporada, como Isaías Rodríguez, quien tiene alrededor de 20 años dedicándose a su vivero de flores y plantas, donde actualmente tiene alrededor de mil 500 macetas de flor de cempasúchil listas para florecer y comercializar.

El floricultor comentó que para que las flores de cempasúchil estuvieran listas en esta temporada, tiene que trabajar previamente entre tres y cuatro meses. Primero, se desarrollan y germinan todo un mes adentro de un invernadero, mientras fueron plantadas en una maceta de cinco pulgadas cada una durante todo septiembre, para que a principios de octubre comenzarán a florecer.

Son decenas de floricultores y floristas los que comercializan la flor de cempasúchil en esta época, ya que puede encontrarse casi en cualquier lado de la ciudad, desde afuera de los panteones, viveros, mercados y en plazas, pues hay quienes incluso venden sus flores en grandes cantidades a otros municipios y estados.


La flor suele comercializarse en los viveros y mercados.


La maceta de flor de cempasúchil cuesta alrededor de 12 pesos, lo que es un precio justo y accesible para los ciudadanos.


La historia de la flor de cempasúchil

La flor de cempasúchil tiene su propia leyenda desde la época prehispánica, por ello, los mexicanos le dan una gran importancia durante el Día de Muertos, porque nunca puede faltar en el tradicional altar.

En la época prehispánica se creía que los coloridos pétalos de la flor de cempasúchil iluminaban el camino de las almas de los que recién fallecían, por eso hoy en día los mexicanos continúan colocándola en las ofrendas.

Además, la flor tiene su propia leyenda, el cual cuenta un relato de amor entre una pareja, Xóchitl y Huitzlin.

Ambos le dedicaban una ofrenda de flores a Tonatiuh, dios del Sol, durante todas las mañanas, hasta que un día el valiente Huitzlin recibió un llamado para ir a la guerra y tuvo que abandonar a su amada Xóchitl, mientras ella esperó su regreso.

Sin embargo, un tiempo después recibió la lamentable noticia de que Huitzlin había muerto y le suplicó a Tonatiuh la oportunidad de volver a verlo y estar con él.

Conmovido Tonatiuh le cumplió su deseo, dejó que los rayos del sol la cubrieran volviéndola en una colorida flor, entonces Huitzilin reencarnado en un hermoso colibrí, pudo hacer contacto con ella y nunca más separarse.