En Guanajuato, en promedio cada 26 horas con 52 minutos es detectada una toma clandestina de combustible y de enero a octubre de 2021 han sido detectadas 214 picaduras de ductos de Petróleos Mexicanos para robar el hidrocarburo.

De acuerdo con el Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal (Igavim), si bien Guanajuato trae una disminución de la detección de tomas clandestinas de aproximadamente un 46% con respecto a las que fueron localizadas en 2020, el que siga habiendo ordeñas ilegales de los ductos de Pemex habla de que el robo de hidrocarburo sigue siendo un delito practicado en el estado, a pesar de la estrategia nacional implementada para erradicar este ilícito.

“Queda claro que existen las condiciones viales, económicas y sociales para que aún persista este delito de manera integral como alternativa en la economía delictiva”, señala el reporte de Igavim.

Según el conteo de tomas clandestinas de Igavim, en donde los datos obtenidos para este conteo provienen de solicitudes de acceso a la información que este observatorio ciudadano realiza, Guanajuato ocupa el cuarto lugar nacional con más ordeñas de ductos, superado por entidades como el Estado de México, Puebla e Hidalgo, que ocupa el primer lugar.

Además, en los reportes semanales generados por la Secretaría de Seguridad Pública del Estado como parte de las acciones del operativo Guanajuato Seguro, se ha dado cuenta de que en el estado se han detectado 214 tomas clandestinas de hidrocarburo.

León, Irapuato, Guanajuato capital, Salamanca, Celaya, Apaseo el Alto, Villagrán, Cortazar y Uriangato son los municipios con más casos de tomas clandestinas detectadas en lo que va de 2021.

Ocho municipios con mayor incidencia

El Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal dio a conocer que durante el primer semestre de 2021, nueve municipios de Guanajuato se colocaron dentro de la lista de localidades con mayor detección de tomas clandestinas.

Irapuato es el municipio guanajuatense con más tomas clandestinas, con 37, lo cual lo coloca en el laygar número 44 a nivel nacional; le sigue Silao, con 29 ordeñas ilegales y con ello se ubica en el lugar 48; le sigue Villagrán, con 26 tomas clandestinas y ello lo ubica en el lugar 52 a nivel nacional.

En la lista también aparece Apaseo el Alto, que registraba 16 tomas clandestinas y con lo cual se colocaba en el lugar 66; Pénjamo aparece en el lugar 70 con 14 tomas clandestinas hasta el primer semestre, mientras que Guanajuato capital aparecía en el lugar 74, con 12 picaduras de ductos de Pemex detectadas.

Salamanca aparece en el lugar 78, con 10 tomas clandestinas, en tanto quew León sumaba ocho y se ubicaba en lugar 88, mientras que Uriangato tenía seis tomas clandestinas y que lo ubicaban en el lugar 97.

“La alternativa de tomas clandestinas, exhibe impactos negativos acumulativos en delitos de alto impacto que no son cuantificados y no solo debe medirse en el volumen perdido, también deben cuantificarse los riesgos, el grado de contaminación y su alternativa económica delictiva que genera y que da continuidad a su apertura”, alertó Igavim.

Delito que persiste, pese a la baja

De acuerdo con Petróleos Mexicanos, la detección de tomas clandestinas en Guanajuato ha disminuido considerablemente, pues mientras en 2018 alcanzó su punto máximo con mil 919 tomas clandestinas, lleva dos años con números a la baja, pues en 2019 hubo mil 198 y 2020 cerró con 611 tomas clandestinas.

No obstante estas disminuciones, la incidencia de robo de hidrocarburos se ha manifestado en los mismos municipios en donde este delito suele darse, lo cual indica que los grupos delictivos siguen generando ingresos a través de este ilícito.

Comportamiento de las tomas clandestinas en Guanajuato por años