Los mexicanos celebran la vida cada día, pero la muerte también es celebrada cada año desde finales de octubre y hasta principios de noviembre, según la creencia popular, un altar debe ser colocado y encendido desde el 28 de octubre para que empiecen a ver el camino las almas de los seres queridos.
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Por esto las calles del centro histórico de Irapuato se llenaron de luces y color con el encendido de este tradicional altar, donde se hizo homenaje a este ciclo de vida y muerte qué nos acompaña desde el inicio de los tiempos y es ya una tradición arraigada para cualquier mexicano.
Cuando la luz solar comenzó a desaparecer el Ágora del Hospitalito empezó a brillar con las más de 200 veladoras qué fueron colocadas en Arcos qué según relataron representan los círculos de la existencia.
Alumnos de la Compañía de Danza del Instituto Irapuato abrieron este evento con una presentación de un baile prehispánico con trajes llenos de metales y plumas, los asistentes también pudieron acercarse con veladoras a observar esta demostración de las culturas de las que iniciaron en el territorio mexicano, esta celebración de la muerte a la que no veían más que como un nuevo comienzo.
"Las veladoras son hoy símbolos de la vida y la muerte, al igual que nosotros son frágiles y temporales pero quedan en nuestra memoria", señalaron al inicio del evento por parte de Veladoras La Gloria qué fue el patrocinador del evento.
El altar flamas de tradición permanecerá el domingo para que los asistentes a los distintos eventos que se llevarán a cabo puedan tomarse una foto 360 y adquirir los distintos productos.
Mientras tanto ya por la noche hubo una obra teatral y espectáculo circense para toda la familia.