Para conmemorar la vida y trayectoria de Samuel Ruiz García, obispo irapuatense que se le reconoce por su dedicación para evangelizar a más de 800 indígenas en San Cristóbal de las Casas, en Chiapas, lugar donde trabajó 40 años utilizando su lengua materna, se realizará una remodelación de su monumento que se encuentra en la avenida Guanajuato de la Zona Centro del municipio.
Samuel Ruiz se destacó por su compromiso con las comunidades indígenas, a quienes no solo evangelizó, sino que también enseñó en sus propias lenguas, lo que marcó un hecho sin precedentes en la historia moderna de la Iglesia católica en México.
Samuel Ruiz fue obispo de San Cristóbal de las Casas durante cuatro décadas, desde los 35 años hasta los 75, lo que lo convierte en uno de los obispos más longevos en ese cargo.
Además, fue reconocido por su habilidad para comunicarse en varios idiomas, incluyendo español, italiano, francés, inglés, alemán, griego, hebreo y latín, sin embargo, su mayor legado fue haber aprendido y utilizado la lengua maya para evangelizar a las comunidades indígenas.
Mauricio Bravo González, coordinador del Centro Histórico, dio a conocer que el monumento de este obispo irapuatense será remodelado como parte de las actividades que se realizarán en su honor.
“El tres de noviembre se cumplen 100 años del natalicio de Samuel Ruiz, por ello se quiere hacer una conmemoración, seguramente la siguiente semana Obras Públicas comenzarán con algunas adecuaciones y arreglos, como los anteojos que le dañaron se van a reponer, será dignificar el espacio”.
Por su parte, Luis Armando García Ojeda, presbítero y rector del templo de San José Obrero en la colonia Esfuerzo Obrero, destacó la importancia de la figura de Samuel Ruiz para la iglesia y las comunidades indígenas.
"Samuel fue un hombre bondadoso, jamás lo vi violento, durante seis años, él y su equipo trabajaron en la traducción de los Evangelios del español al maya, lo que permitió que más de 800 indígenas pudieran recibir el catecismo en su lengua materna", comentó.
También recordó cómo Samuel Ruiz impulsó la creación de una escuela de catequistas indígenas, dejando un legado de más de 800 catequistas que continúan transmitiendo el Evangelio en lengua maya.
"Él siempre creyó que la iglesia debía construirse de abajo hacia arriba, es decir, que los indígenas no debían aprender castellano para ser evangelizados, sino que se debía respetar y utilizar su lengua para transmitir la fe", agregó.
Aseguró que a lo largo de su vida, Samuel Ruiz fue un defensor de la paz, particularmente durante el conflicto armado entre el grupo armado Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), y el gobierno federal; su catedral fue el escenario de los diálogos entre ambas partes, con el objetivo de evitar una mayor violencia.
"Samuel no dirigió al EZLN, como algunos piensan, él era un hombre pacífico y su papel fue impedir que el engranaje de la violencia se desatara", aseguró el sacerdote.