Fiel hasta después de la muerte: Perro llora la muerte de su dueño en Irapuato

Rocko y Don Chema paseaban juntos en su motocicleta por las calles de Irapuato, convirtiéndose así en grandes personajes de la ciudad

Fernanda Garduño | El Sol de Irapuato

  · jueves 15 de junio de 2023

Durante las últimas horas después del fallecimiento de José María, Rocko no ha probado bocado. Fotos: Cortesía

Bien es dicho que el perro es el mejor amigo del hombre e Irapuato fue testigo de ello una vez más, esto tras la muerte de Don Chema, quien se hizo famoso en la ciudad por pasear en motocicleta con su fiel perro “Rocko”.

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Pero la muerte separó a estos dos grandes amigos, la muerte de José María fue repentina debido a un padecimiento que presentaba, sin embargo hasta el último día de su vida amó y paseo con su perro.

"Apenas el martes lo vimos iba muy feliz con su perro, lamentamos mucho su partida", comentaron mediante redes sociales, donde pronto se hizo viral una fotografía de Rocko con un semblante triste a un costado del féretro de su dueño y amigo.

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Rocko es un perro de la raza pitbull, tiene 11 años de edad y desde cachorro fue criado por José María, familiares del hombre relataron que el perro pasó a sus manos, pues era de su esposa, sin embargo desde entonces era claro el fuerte lazo que él y Rocko tenían, "tal como si sus almas hubieran estado unidas desde antes de conocerse", mencionaron.

La muerte de José María sorprendió a todos, pero los mismos familiares del hombre dijeron "Rocko es el más afectado, no sabe qué está pasando y no podemos hacérselo entender, estamos destrozados".

Don Chema se dedicaba a trabajar como velador, a donde quiera que iba llevaba a su perro quien paciente esperaba y hasta cuidaba su moto.

"Siempre lo entendió muy bien, y sólo a él, muy obediente y buen guardián, tenemos miedo que ahora que mi hermano no está le pueda pasar algo por la tristeza".

Familiares aseguraron que se harán cargo de Rocko pues lo consideran parte de la familia, sin embargo la preocupación los invade pues durante las últimas horas después del fallecimiento de José María, Rocko no ha probado bocado.

"Desde que murió se veían sus lágrimas en los ojos, no se ha despegado del ataúd ni deja que nadie se acerque".
Rocko hizo guardia a su dueño y amigo, familiares y amigos llegaron y trataron de acariciarlo o darle cosas ricas para comer pero Rocko lo único que quería era estar a un lado de los arreglos florales, pues como algunos dijeron "Él sabía que quien con tanto amor lo crió cerró sus ojos para siempre".