GUANAJUATO, Gto; En completo abandono es como se encuentra los embalses de San Renovato y Presa de la Olla, sitios emblemáticos de las festividades de San Juan y Presa de la Olla, decretadas el 24 de junio del 2013 como Patrimonio intangible del estado de Guanajuato.
Y es que, aunque los capitalinos se preparan para disfrutar este 24 de junio de un año más de la tradicional fiesta de San Juan y Presa de la Olla, enmarcadas con la celebración de San Juan Bautista, las autoridades municipales se han olvidado de dar mantenimiento a los dos embalses.
La construcción de la presa se originó derivado a la escasez de agua potable que sufrió la ciudad, motivo por el cual se construyó la presa en el año 1741 y concluida en 1749, en el espacio denominado Rancho de Olla; tradición que posteriormente fue arraigada por los capitalinos.
El espacio además de ser altamente concurrido durante los festejos, en el resto del año cientos de turistas y lugareños se dan cita en el lugar, sin embrago actualmente luce descuidado, al ser el grafiti pintas que resaltan en su fachada.
Tras un recorrido en la zona comerciantes del lugar criticaron que a días de que se lleve a cabo las fiestas, las autoridades “no hayan venido a echarle una manita de tigre”, pues aunado a las pintas, la basura, falta de vigilancia y deterioro del lugar se han vuelto una constante.
E incluso en el sitio además de observarse botellas de bebidas embriagantes, también estaba un perro muerto y en avanzado estado de descomposición, en uno de los lugares altamente concurrido por lugareños y turistas.
Una de las comerciantes de la zona quien prefirió omitir su nombre señaló que “no es justo que siempre se tenga en descuido la presa”, pues, aunque reconoció que es la propia población quien ha contribuido al deterioro del lugar, las autoridades por su parte se han olvidado de brindar el mantenimiento necesario.
En ese sentido aprovechó para hacer un llamado a la autoridad competente y se dignifique el espacio en el que este 24 de junio se llevará a cabo una de las festividades más representativas de los capitalinos.
La liberación del agua que tenía como principal objetivo limpiar el caudal, se convirtió en celebración con la llegada de las lluvias a la ciudad, durante la celebración los asistentes tienen la oportunidad de disfrutar de juegos mecánicos y de azar, así como de grupos musicales y comidas.
En la actualidad cada año es instalada una carpa en la que autoridades municipales y estatales se reúnen a comer, incluido el gobernador y alcalde, así como familias guanajuatenses.