El Rey murió. Edson Arantes do Nascimento, mayormente conocido como Pelé, dejó este plano terrenal el 29 de diciembre del 2022, pero su legado y amor por el futbol jamás será olvidado.
En vida, Pelé ganó miles de reconocimientos por su trayectoria dentro y fuera de las canchas, como convertirse en campeón del mundo en tres ocasiones, ser campeón con los clubes en los que jugo, así como recientemente ser considerado para los premios de El Balón de Oro, pese ha ya haberse retirado.
Sin embargo, uno de los que más añoró y significó algo en su vida, fue el que le entregó la Organización Editorial Mexicana por medio de El Sol de Irapuato, como parte de los festejos en el marco de la celebración de sus primeros cien partidos defendiendo los colores de su selección, por lo que desde ese momento se convirtió en el amigo de El Sol de Irapuato.
El trofeo, era un sombrero mexicano hecho en plata hecho específicamente para el joven brasileño, el cual fue entregado luego de tener un partido de preparación antes de disputar el mundial de México 70, en el que se consolidaría la selección de Brasil como el campeón del mundo.
El sombrero de plata fue entregado por el director de El Sol de Irapuato, Alfonso Chico Patiño, quien fue el fundador de este periódico, el cual es líder en la región.
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El premio significó tanto para Pelé, que sin dudarlo dos veces lo guardó, para posteriormente colocarlo junto a sus miles de trofeos en un museo que fue construido en su honor y en donde hasta hoy se encuentran sus decenas de premios, trofeos e incluso sus tres copas del mundo que ganó con la selección verdeamarela.
El Museo de Pelé, está ubicado en Valongo, en Río de Janeiro, en Brasil, donde en cuatro mil metros cuadrados está contenida la historia de Edson Arantes Do Nascimento, el considerado mejor jugador del mundo y el mismo que en su corazón se llevó al pueblo de Irapuato y el reconocimiento que le hiciera El Sol de Irapuato en aquel lejano mayo de 1970.