La carencia de combustible en la mayoría de las gasolineras de Irapuato ha provocado el cierre temporal de los establecimientos, situación que repercute directamente en la economía de los empleados del lugar, ya que la ausencia de usuarios impide que los despachadores reciban su propina después de brindar el servicio.
Fausto Paredes, quien se dedica a despachar combustible en una gasolinera ubicada en el bulevar Díaz Ordaz, dijo que desde el pasado domingo no ha sido posible que los empleados reciban propinas por parte de los usuarios, pues si no hay gasolina, los ciudadanos no acuden a los establecimientos y esto afecta la economía de los trabajadores.
"Nos impacta mucho, por ejemplo las comidas y lo que llevamos a comer a la casa es de diario y lo que la gente nos da de propina nos sirve para el sustento de la familia, tenemos que esperar 15 días para percibir el salario, no nos han informado sobre cuándo va a llegar la gasolina que a nosotros nos urge por el tema de las propinas".
El empleado señaló que el salario promedio de un despachador de gasolina es de mil 430 pesos quincenales, sueldo que no es suficiente para dar el sustento necesario a su familia, por lo que dijo es importante que el servicio de las gasolineras se restablezca lo antes posible para que así los trabajadores aspiren a obtener un ingreso extra.
"A nosotros nos afecta en todo porque de aquí sacamos para comer, ocupamos de las propinas para llevar algo a la casa, ahorita así como llegamos nos regresamos, tenemos el sueldo mínimo, ganamos mil 430 a la quincena y no podemos hacer mucho con eso, es lo que nos afecta, llevamos cuatro días con esto, no más el domingo hubo gasolina".