Cortazar, Gto.- Entre música de banda, coronas florales y fotografías con emotivos recuerdos, familiares y amigos dieron el último adiós a Álvaro Ojeda Salazar, migrante fallecido al interior de una caja de tráiler en San Antonio, Texas, el pasado 27 de junio.
Familiares y amigos se reunieron en la casa de la familia de Álvaro, en la colonia Alameda, para despedir al joven de 23 años de edad, quien salió desde el pasado 7 de junio a buscar el llamado "sueño americano", a fin de dar una mejor vida a su familia.
Dejando a su esposa y dos hijos menores de edad, el joven cortazarense se aventuró a la frontera para llegar a Estados Unidos esperanzado de poder llegar a su destino, sin imaginar la tragedia que estaba a punto de suceder.
Sus familiares en Cortazar recibieron la lamentable noticia de su fallecimiento, pese a que el joven migrante se mantuvo en constante comunicación con su familia, pues no logró cruzar en el primer intento y volvió a intentarlo.
Hoy su familia y amigos lo recuerdan como una persona muy querida y muy participativa, pues era un joven que disfrutaba compartir con sus compañeros y amigos de clubes de motos y autos, además era amante de los gallos.
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Además, lo recuerdan como alguien alegre, amable y que no dudaba en ayudar a los demás sin esperar nada a cambio. Descanse en paz Álvaro Enrique Ojeda Salazar.
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