Niños y niñas podrán ser embajadores en la preservación del patrimonio cultural de sus localidades, sin embargo para esto es crucial dotarlos de educación en las artes, aseguró Susana Maravall Cifuentes, coordinadora de la Fundación Amigos del Museo del Prado (FAMP).
En una entrevista exclusiva con la Organización Editorial Mexicana durante su visita al estado de Guanajuato, compartió algunos de los objetivos de la fundación, que acerca el museo desde miles de kilómetros a las niñas y niños de todo el estado.
Te recomendamos: El Museo Nacional del Prado visitará Guanajuato, ¿en qué municipios estará? Aquí te decimos
“Nuestra idea inicial de crear este viaje al corazón del arte que en nuestro caso lo centramos en las obras del Museo del Prado también, es una manera de acercar el museo que se encuentra a miles de kilómetros de distancia a los niños de Irapuato y a niños también del estado de Guanajuato”.
Compartió que en su visita a territorio irapuatense notó que la respuesta de las y los niños que asistieron a la presentación fue fructífera, pues se interesaron totalmente en el tema, lo cual superó todas sus expectativas.
“Las y los niños nos han dado las gracias, nos han abrazado, les hemos visto emocionarse y llorando, les han pedido que les firmemos las camisetas, ha sido una respuesta increíble y muy emocionante”.
Susana Maravall contó que al final de la presentación, se les entregó a niñas y niños un libro en el cual incluía la información de 20 obras del Museo del Prado, regalo que los hará recordar que pueden tener acceso al conocimiento artístico.
“Les hemos regalado un libro todos los niños asistentes, se ha podido imprimir aquí en México gracias a las entidades organizadoras y nos parece fundamental que se pudieran llevar a sus casas que es un libro que contiene información de 20 obras maestras del Museo del Prado, se acerquen más al arte lo disfrutan y lo vean como algo propio y que ellos se tienen que involucrar en conservarlos”.
Por su parte, Ana Sanabria, una de las docentes que formó parte del equipo de la Fundación Amigos del Museo del Prado, narró que su experiencia fue realmente emotiva, debido a que las infancias guanajuatenses respondieron mejor de lo que esperaban ante este proyecto.
“Esta curiosidad de los infantes nos ha sorprendido muchísimo porque, hacían preguntas sobre las obras, pero también nos hicieron preguntas generales sobre el arte, como el porqué existe, quiénes son los primeros pintores, cuándo fue la primera vez que se pintó un cuadro, nos preguntaban mucho por nosotras de por qué nos gusta el arte porque trabajamos en esto y eso nos parece precioso”.
Añadió que gracias a las áreas organizadoras en el estado este proyecto tuvo tanto éxito, y admitió que, al haber tenido una grata experiencia al visitar el estado y el municipio de Irapuato, si tuviera la oportunidad de regresar, la tomaría sin dudarlo.
“Estoy completamente emocionada y agradecida a todo el equipo que ha hecho posible este proyecto, porque son muchísimos los que están detrás, nos han cuidado increíblemente, nos sentimos como en casa y volvería una y mil veces a repetir esta experiencia”.
Además, Susana Maravall Cifuentes, recordó que la historia de la fundación, y también narró su experiencia en el estado de Guanajuato y principalmente en el municipio de Irapuato, donde pudieron compartir cultura y arte con las y los niños.
“Esta fundación fue creada en el año 1980 en Madrid, España, con la intención de generar un apoyo de vincular a la sociedad con el Museo del Prado y que sintiese al Museo del Prado como algo propio, patrimonio de todos y que la gente se involucrara en su conservación y en su futuro”.
Narró que esta fundación nació gracias a un historiador de arte reconocido y querido en España, quien laboró junto a un grupo de personas igualmente interesadas en promover el amor a la cultura y las obras artísticas que se pueden encontrar en el Museo.
▶️ Suscríbete a nuestra edición digital
“Amigos del Museo se creó en torno a la figura de un historiador de arte muy reconocido en España, Enrique Lafuente Ferrari y un grupo de personas que junto a él tenían el mismo enfoque, inspirar a la gente a participar de manera activa con el museo y que fuera parte de su identidad; actualmente tenemos más de 40 años de historia de apoyo al Museo del Prado por lo cual nos sentimos muy muy orgullosos”.