Carlos Díaz y Marlene Reséndiz son dos artistas plásticos de tradición en la capital del estado, pues continúan con el legado que la familia Reséndiz formó desde hace más de 30 años en la “esquina del arte”.
Marlene Reséndiz, sobrina del muralista guanajuatense Rubén Reséndiz, reconocido por la gran mayoría de los capitalinos por haber pintado el mural que se encuentra en la actual Central de Autobuses y fue nombrado como “La Panorámica de Guanajuato en 1928”.
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Desde muy joven, Marlene tuvo contacto con la pintura, por lo que desde muy pequeña comenzó a practicar esta bella arte para posteriormente pintar espectaculares obras, mismas que vende en la equina del arte, denominada así por sus tíos, quienes comenzaron a vender sus pinturas justo a un costado del Teatro Juárez.
“Desde los ocho años comencé a pintar, porque vengo de familia de pintores, mi papá era serigrafista y mi tío Rubén muralista, por lo que pintar ya viene por la herencia”, expresó la artista.
Por su parte, Carlos Díaz es un pintor egresado de la Universidad de Guanajuato en la especialidad de Artes Plásticas, quien al igual que Marlene, desde muy joven descubrió su pasión por las técnicas de pintura y dibujo.
“A los 16 años me apasioné por la pintura y en Guanajuato había un grupo que se llamaba 'Expresión Cultural', el cual era un grupo que fue formado para mostrar todo tipo de arte principalmente a los asistentes del Cervantino”, comentó el pintor.
Actualmente Marlene y Carlos son esposos, su amor por la pintura los unió y ahora los dos continúan con el legado de la “esquina del arte”, donde se exponen a la venta magníficas obras que relatan la historia de México y, por supuesto, la historia y caminos de la capital guanajuatense.
