Enrique Díaz Díaz, obispo de la Diócesis de Irapuato, dio a conocer que ahora que ya concluyó el proceso electoral y se conoce quienes fueron electos, deberán trabajar con un objetivo en común, que mejorar las situaciones que aquejan a la población, esto con ayuda de la colaboración entre los diversos sectores, ya que lo más importante es el bien de la ciudadanía.
“Lo importante es trabajar con las distintas autoridades con lo que se ha manifestado como una urgencia, como la seguridad, la paz y un trabajo en conjunto con todos; cuando hablábamos con los candidatos que ahora algunos son electos, decíamos que es posible construir esas relaciones ya que, tenemos el mismo destinatario, estamos cuidando a la misma ciudadanía y lo importante es el bien común”, dijo durante su conferencia de prensa dominical.
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Enrique Díaz Díaz comentó que sí puede lograrse el dejar atrás las rivalidades que se dieron durante las campañas entre los distintos partidos políticos, para priorizar el bienestar de toda la comunidad, además, dirigiéndose a la población, mencionó que el compromiso no concluye al haber votado, sino que todas y todos deben esforzarse para trabajar juntos con el mismo objetivo.
“Tanto autoridades electas como a los partidos que no fueron reconocidos por la ciudadanía para ser ganadores, ahora tendrán que trabajar y, a la ciudadanía, decirles que no termina nuestro compromiso con un voto, la verdadera política es trabajar día con día por el bien común”.
Externó que fue un alivio que el proceso electoral en el estado de Guanajuato se realizó sin ningún percance, ya que muchos creían que serían una de las elecciones más violentas de la historia.
“Gracias a Dios en las elecciones en nuestro estado, no se dio estas situaciones que tanto temíamos, fue una jornada bastante tranquila, muy participativa, con un ambiente muy cordial y respetuoso y ojalá sea el inicio de un nuevo planteamiento donde podamos trabajar todos unidos”.
Asimismo, compartió un mensaje de todos los obispos que conforman la Conferencia Episcopal de México, dirigido a toda la población que ejerció su derecho al voto, con el que se fortaleció la democracia del país.
“Debemos sentirnos satisfechos por el deber cumplido y con un compromiso por delante para cuidar y mejorar nuestras instituciones democráticas”.
Además, como iglesia felicitaron a Claudia Sheinbaum Pardo, por haber sido elegida como la primera presidenta de la República, solicitando que trabaje siempre buscando mejorar la calidad de vida de todas y todos los mexicanos.
“Elevamos nuestras oraciones para que, con la responsabilidad y sabiduría que el cargo demanda, y buscando siempre el bien común, pueda conducir a México hacia mejores horizontes donde la República se fortalezca, el estado de derecho se viva plenamente, la democracia permita la transición política sin violencia”.
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Concluyó reafirmando su compromiso como integrantes de la iglesia católica de seguir colaborando con todas las personas que tienen buena voluntad, con la responsabilidad de construir la paz y buscar el desarrollo integral de nuestra sociedad.