La violencia en contra de las mujeres dentro de la familia tiende a aumentar cuando existen temporadas vacacionales; sin embargo, existen instancias que pueden ayudar a las víctimas de esta.

El Instituto de las Mujeres Irapuatenses (Inmira) es una de éstas, pues cuenta con servicio de acompañamiento para mujeres que ven vulnerada su seguridad e integridad como víctimas de la violencia en casa o de otras índoles.

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Georgina Aboytes, titular de Inmira, señaló que las violencias se viven en cada caso de formas diferentes; sin embargo, unas son desencadenantes de otras y estos casos son más vistos en temporadas vacacionales donde aumenta la convivencia de varias personas en casa.

“Todos los tipos de violencia que conocemos inician con violencia psicológica, cuando son vacaciones se incrementa el abuso físico, verbal y otros, como tal no hay una que sea más que otra, pues una es desencadenante de las demás por lo general”.

Sin embargo, destacó que las mujeres en Irapuato deben saber que no están solas y si no saben a dónde acudir, por medio de Inmira hay personal que puede brindar asesoría y acompañamiento a víctimas de distintas violencias.

“Las mujeres pueden acudir a las instalaciones de Inmira en calle Francisco Sarabia 1066, en La Moderna, en horario de 8:30 a 4:00 de lunes a viernes, hacemos el proceso de acompañamiento y si desean interponer denuncia las acompañamos al Centro de Justicia para la Mujer”.

Destacó que durante las temporadas vacacionales se cuenta con guardias donde pueden seguir brindando este acompañamiento, además de seguimiento integral de cada caso.

“En vacaciones tenemos guardias, seguimos trabajando para dar este acompañamiento y sobre todo contención emocional”.

Comentó que en casos de violencia los primeros signos tienden a ser normalizados, como celos que escalan a abusos verbales o golpes, muchos de estos no se denuncian hasta que ya hay daños graves a la integridad.

“Es algo que normalizamos, que es lo más problemático pensamos que desde que no te cela no te quiere, que te violente por cómo vas vestida y no te deje salir son situaciones que vamos aceptando como normales”.

Dentro del seguimiento que se brinda en Inmira está la parte de la contención emocional que busca fortalecer a la víctima para que pueda seguir adelante con su vida.

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“Las víctimas se aíslan, creen que es su culpa por que ellas lo provocaron y sobre todo tienen miedo, lo primero que necesitan saber es que no están solas, este acompañamiento es de seguimiento de su proceso y les damos terapias para que vuelvan a armarse porque el violentador lo que hace es destruir la autoestima para manipular, entonces hay que reedificar esta confianza, resignificar el valor que tenemos, y de ahí entonces hacernos fuertes para un tema legal o otro, todo sobre la base del amor propio”.