Así fue la historia del tranvía de Irapuato

En Irapuato hubo dos líneas de tranvía, una que perteneció a don Francisco Guerrero, que se puede identificar cómo la de tranvías pequeños, y la de Hipólito Chambón, que se pueden identificar como de mayor tamaño y de diversos servicios como carga, funerarios y de servicios del municipio; ambos iniciaron operaciones alrededor del año de 1907.

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Sin embargo, existen fotos que aparecen fechadas hacía 1900 y eso es 7 años antes del inicio de operaciones de las dos líneas de Tranvía.

Ya en los documentos que aparecen desde 1885, la Compañía Limitada de Ferrocarril Urbano inició el tendido de vías de tranvía, pero de acuerdo con los textos manuscritos de don Genaro Acosta, este tendido no se realizó. Más bien no se concluyó y prestaba el servicio parcial de la Estación de Trenes al paso del río Silao, es decir, a partir de lo que hoy es Díaz Ordaz, del otro lado del río Silao, hacia el bordo del río y Morelos, donde había carruajes para continuar al centro de la población.

El tratante de apellido Ocejo construyó el primer puente para el paso del tranvía, pero no pudo entrar en funciones hasta años después.

El principal obstáculo para abrir la línea del tranvía fue la imposibilidad de abrir el depósito de los vagones de tranvías y los corrales de las mulas que los jalaban, esto ante la negativa de la señora Soledad Alcántara de vender los terrenos contiguos a la estación de ferrocarriles, para crear las instalaciones ya descritas para el funcionamiento del Tranvía de Irapuato

El puente que se creó para el paso de los primeros tranvías entonces se puede llamar como el Puente Ocejo, el litigio entre la señora Alcántara y el señor Ocejo demoró el funcionamiento del tranvía de manera total de 1894 a 1907.

Por ello las concesiones de las líneas de tranvía, ya en 1907, pasaron a los señores Guerrero y Chambón.

Sus rutas eran:

La ruta de Chambón: Estación del tren-Calzada de la Estación (Isabel la Católica)-Morelos-5 de mayo-Rinconada Castañeda-Santos Degollado-Giro en torno al Jardín Hidalgo, frente a la Presidencia-Hidalgo-Calzada Insurgentes y Santuario de Guadalupe del Puente y regreso similar en ruta, hasta 5 de Mayo, doblaban en Ocampo y seguían por Calzada Centenario, hasta llegar a la Estación de Trenes de Irapuato nuevamente.

La otra ruta, la de don Salvador Guerrero: Partía de la Estación del Tren-Calzada de la Industria-Morelos-Guerrero-Juárez-Giro en torno al Jardín Principal-Hidalgo-Calzada Insurgentes y Santuario de Guadalupe del Puente. Y regreso en la misma ruta.

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Las 4 bases de tranvías eran: Estación del Tren, Jardín Principal, que en aquella época de inicios del siglo pasado se le llamaba Jardín Hidalgo, frente a los Conventos Franciscanos, y Calzada Insurgentes, entre Manuel Doblado y 20 de Noviembre; esta tenía incluso un restaurante. Y la del frente del Santuario de Guadalupe del Puente.

El proyecto de electrificar el tranvía en las ciudades de Guanajuato, León e Irapuato fue hecho por el cónsul francés en Irapuato, Ernest Brunel, estaba calculado en 8 millones de pesos de 1910. En Irapuato era más ambicioso el proyecto, ya que se buscaba llevar líneas de tranvía a las haciendas para trasladar producciones, a la estación de trenes de Irapuato y quedo truncado, debido a la revolución en 1910.

Puente Ocejo. Se construyó desde 1885 y se puso en funciones hasta 1907.

Estación de tranvías en lo que hoy es el Andador Juárez, entre el Jardín Principal y los Conventos Franciscanos.

Tranvía circulando por la Calle Guerrero, entre la actual Revolución y Allende.

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