Aldama y sus alrededores, de las zonas más secas del estado: CIAG

Aumento de construcciones, crecimiento de la mancha urbana han afectado la zona de recarga y urge reforestar, aseguró René Mendoza, presidente de la asociación

Fernanda Garduño / El Sol de Irapuato

  · sábado 27 de abril de 2024

La reforestación podría ser una solución pero a mediano o largo plazo. / Fotos: Marco Bedolla / El Sol de Irapuato

La zona de Aldama y sus comunidades colindantes, en Irapuato, es considerada una de las más secas de todo el estado, señaló René Mendoza, presidente del Colegio de Ingenieros del Agua de Guanajuato, quien señaló que la deforestación y construcciones sin control han impactado las zonas de recarga.

Algunas de las comunidades que se encuentran cerca de esa zona, tales como El Comedero, Comederito, Encino del Copal, entre otras, han presentado problemas graves durante los últimos años por la sequía, en donde la gente que habita estas comunidades se sostiene principalmente de la práctica agrícola, pero ahora, ríos y presas están secos.

“Ahí lo que sucede es la deforestación, porque aunque yo haga siembra o haga labores en la tierra para poder captar agua, si no llueve, de nada sirve”.

Destacó que uno de los factores que se han detectado en esa zona es el aumento de construcciones, además de que el crecimiento de la mancha urbana, que a la vez trae consigo un calentamiento de la tierra.

“Ahora ya sabemos que los árboles atraen lluvia, pero de nada sirve, también tenemos la desventaja de que, por ejemplo, en Aldama, que son las zonas más afectadas, ha sido por el aumento de constructoras”.

Explicó que el único camino para tratar de revertir este fenómeno es la reforestación, la continuidad a estos temas.

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“El único camino es la reforestación y tengo que resaltar que en Irapuato cuando se decreta la zona de recarga todo es una simple métrica, pero si no se le da continuidad, entonces es cada vez más complejo tratar de mantener cuando todo está seco y una cosa nos lleva a la otra, mayor crecimiento poblacional, mayor expansión de la mancha urbana y, por ende, mayor calentamiento del pavimento y menor posibilidad de lluvia”.

Sin embargo, René Mendoza también aclaró que el cambio no se dará de la noche a la mañana, el combate a la sequía podría tomar con estas medidas al menos 5 años, sólo si el estado tiene lluvias abundantes; de lo contrario, esto podría empezar a revertirse en hasta 10 años.

“Todo es dependiendo del manejo y luego vamos a salir con el siguiente problema, el marco legal, si no es adecuado a tener instrumentos de verificación, de control y visión, es decir vienen obras tras obras, vienen grandes anuncios de grandes acciones y todo queda en la primera piedra, entonces por ende no podemos hablar de ninguna base”.