Tristes y solitarios, es como se sienten los 54 adultos mayores que viven en la Casa Hogar “La Paz” de Irapuato, ya que por la pandemia del coronavirus, no podrán recibir visitas en el Día del Abuelo, pues pasarán su celebración con ausencia de regalos, abrazos y felicitaciones de las personas.
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El Día del Abuelo se celebra cada 28 de agosto, y las 26 mujeres y 28 hombres que viven en el asilo de Irapuato saben de ello, pues a pesar de que la mayoría no tiene familiares, cada año esperan con ansias la fecha para celebrar y recibir visitas de familias, niños y jóvenes que los acompañan en su festejo, donde incluso suelen recibir regalos que alegra más su día.
- Desde que los adultos mayores del asilo de Irapuato dejaron de recibir visitas por el coronavirus, sus ánimos han decaído; sin embargo, las hermanas hacen lo posible para mantenerlos motivados, principalmente en su celebración del Día del Abuelo
Gloria Andrea Montalbo González de 81 años de edad y originaria de Veracruz, es una de las mujeres que vive en el lugar y que se sabe decenas de populares refranes, mientras cosía la bastilla de un pantalón que usará el Día del Abuelo, contó que ella nunca se quiso casar y mucho menos tener hijos; y ahora que es mayor, disfruta convivir con las hermanas del lugar.
- Arturo Razo Savedra esperaba recibir una grabadora para escuchar la radio
Aseguró que cada año están acostumbrados a celebrar entre todos en el pequeño salón; sin embargo, sabe que este año la celebración será triste, ya que algunos, como ella, son conscientes que no recibirán visitas ni regalos en su día, pues ella esperaba poder recibir playeras para soportar el frío.
- Ernesto Pérez Rodríguez espera que pronto acabe la pandemia, para volver a ver a su familia
Otra de las personas que viven en el lugar, es Ernesto Pérez Rodríguez de 65 años de edad, y quien es originario de la Ciudad de México, él tiene alrededor de 10 años viviendo en el lugar y le apasiona hablar de su familia, sus papás, sus hermanos y sobrinos, quienes incluso lo salían sacar a restaurantes y a plazas cada semana.
Sin embargo, Ernesto no ha vuelto a salir desde que inició la contingencia sanitaria, ni mucho menos podrá recibir visitas de su familia en el Día del Abuelo, pero a pesar ello, él estará al pendiente si recibe alguna llamada telefónica por parte de sus familiares y con la esperanza de recibir uno de los perfumes que recibe cada año.
- Gloria Andrea Montalbo González cada año espera con ansias la celebración del Día del Abuelo
Arturo Razo Saavedra de 78 años de edad, es de los pocos que todavía tiene a su familia, él no sólo convive con sus compañeros de la casa, sino también suele ser portero y mandadero del lugar, pues el disfruta ayudar en las labores del lugar y con tareas sencillas. Mientras que en sus ratos libres, disfruta escuchar la radio y ver fútbol.
Contó que el esperaba tener una gran celebración del Día del Abuelo, e incluso recibir una grabadora para escuchar la radio, pero por el coronavirus, sabe que este año no será así.