“No Gatos”: Construyen casita para perros con un toque de humor en Irapuato

Lo que hace única a esta historia es el peculiar anuncio adjunto a la casita

Paul Witrago/ El Sol de Irapuato

  · lunes 4 de marzo de 2024

Bromean sobre la posibilidad de que algún gato pueda leer y obedecer la prohibición de entrar al hogar de los dos caninos / Fotos: Paul Witrago / El Sol de Irapuato

Irapuato, Gto. (OEM).- La solidaridad y empatía de los vecinos de la calle Fray Juan de Zumárraga, en la colonia 8 de junio, se hizo evidente al construir una acogedora casita para dos perritos conocidos localmente como "El Tayson" y "La Güera".

Este gesto de bondad busca brindarles protección contra las inclemencias del tiempo / Fotos: Paul Witrago / El Sol de Irapuato


Este gesto de bondad busca brindarles protección contra las inclemencias del tiempo, incluso dotándolos de cojines y una cobija en el interior de su nuevo refugio.

Sin embargo, lo que hace única a esta historia es el peculiar anuncio adjunto a la casita que dice "No Gatos"; Este detalle ha generado curiosidad y risas entre los vecinos y transeúntes, quienes bromean sobre la posibilidad de que algún gato pueda leer y obedecer la prohibición de entrar al hogar de los dos caninos.

Miguel Ángel Ramírez, residente de la zona, compartió que estos dos perritos son guardianes dedicados, especialmente durante las noches, cuidando y procurando a las personas de la calle. Su comportamiento afectuoso se manifiesta en ladridos cuando los vecinos llegan a casa, y suelen ser juguetones, correteando a ciclistas sin llegar a morder.

Buen humor en Irapuato

“Estos dos perritos procuran muchos a las personas de la calle, porque los cuidan sobre todo por la noche” comentó Miguel Ángel

La iniciativa de los vecinos refleja la conexión comunitaria y la preocupación por los animales desamparados. Aunque la divertida advertencia sobre los gatos ha causado revuelo y risas, la esencia del gesto es solidaria y ejemplar, mostrando cómo pequeñas acciones pueden hacer una gran diferencia en la vida de seres vulnerables.

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Es un recordatorio de que, a pesar de los desafíos que enfrentan, tanto las mascotas como los vecinos pueden encontrar consuelo y alegría en la bondad compartida, creando un entorno donde los lazos comunitarios se fortalecen y los corazones se llenan de gratitud.