Pumas y América desearon el gol, lo quisieron, pero estuvo ausente y firmaron un empate disputado sin anotaciones en el estadio Olímpico Universitario.

Pumas y América se pararon en CU en busca de cumplir con las expectativas que causaron a lo largo de la semana, y cada uno con sus argumentos lo hizo.

Con mejor plantel, América tomó la iniciativa con permiso de los auriazules, que apostaron por aguantar y tratar de conectar con latigazos con su goleador Nicolás Castillo, que fue bien vigilado.

Las Águilas generaron llegadas de mayor peligro en el primer lapso; Cecilio Domínguez, quien sabe anotar a Pumas, perdonó la primera con remate que detuvo Alfredo Saldívar a quemarropa.

Después disparó de larga distancia Guido Rodríguez y el guardameta felino tapó de manera notable para comenzar a ser factor en el encuentro, donde Pumas, por instantes, se mostró desaparecido.

Eso sí por intensidad no quedaron a deber ningún equipo, entraron con todo frente al acérrimo rival, por ahí incluso Guido dio un manotazo en la cara a David Cabrera sin que se marcara nada por parte del árbitro Luis Enrique Santander.

Pumas tuvo la suya por conducto de Matías Alustiza, en la que el portero Agustín Marchesin aguantó para evitar la anotación y Jesús Gallardo intentó con disparos de lejos; de ahí en fuera, el resto seguía siendo de América.

Antes del descanso, las Águilas tuvieron otro aviso de peligro, ya que el defensa de Pumas Luis Fuentes casi hace autogol con cabezazo al poste, en su afán de evitar el remate de la ofensiva americanista.

Pumas necesitaba mostrar otra cara, para lo cual ingresó Pablo Barrera; mientras que el América requería mantenerse en la parte complementaria bien parado y dominador.

La visita otra vez fue el primero en tocar puerta en el segundo capítulo con disparo desviado de Cecilio y luego el mismo paraguayo hizo una genialidad dentro del área para quedar frente a Saldívar, que atajó.

Pumas respondió casi en forma inmediata, centro por izquierda y Nicolás Castillo rozó el gol con remate poco ortodoxo. Había “clásico, pero el gol se resistía en ambos lados.

Más tarde, “Nico” se quedó cerca de la anotación, pero ahora el travesaño le negó el festejo para fortuna del América, que parecía perder el dominio avasallador de la primera mitad. Pumas comenzaba a ser más.

En el cuadro de Coapa se dio el debut del colombiano Andrés Ibargüen con la finalidad de recuperar la posesión del balón ante la presión que ejerció Pumas de mejor forma en el tramo final del cotejo.

Los azulcremas cerraron con 10 jugadores en una mala expulsión a Mateus Uribe, quien buscó un remate de chilena y le pegó a Castillo. Una decisión exagerada, pues en el primer lapso por un manotazo a un rival ni vio la tarjeta amarilla.

El resultado no se movió y concluyó otra edición más de esta rivalidad, ambos siguieron invictos y América no sabe lo que es perder en CU desde 2014.

De esta forma, Pumas llegó a siete puntos en la cima de la tabla y América, que acabó con 10 elementos por la expulsión del argentino Mateus Uribe (89), suma cinco unidades y es sexto lugar.