La noche del sábado pasado, el bar El Condado, ubicado en las instalaciones del Estadio Sergio León Chávez, se convirtió en el epicentro de una vibrante y electrizante tocada de rock urbano, con la esperada presentación estelar de la banda "El Beso de Judas". Este evento reunió a una gran cantidad de fanáticos del género, quienes llenaron el lugar desde temprano para disfrutar de una noche llena de energía, con letras clásicas del género que resonaron con fuerza en el corazón de todos los presentes.
El ambiente en El Condado era de pura camaradería y amor por la música. Las luces bajas y la decoración rústica del bar crearon el escenario perfecto para una noche de rock como ninguna otra. El lugar, ya conocido en la escena local por ser un punto de encuentro para los amantes del rock y otros géneros alternativos, estaba a su máxima capacidad, con personas que llegaron de diferentes partes de Irapuato y municipios cercanos, como Salamanca con las ganas de disfrutar de una gran tocada.
"El Beso de Judas" subió al escenario alrededor de las nueve de la noche, con más de 11 años de experiencia en la escena del rock de Salamanca, desde el primer acorde, quedó claro que la banda estaba lista para darlo todo. Esta banda de rock urbano ha sabido ganarse un lugar especial en el corazón de sus seguidores, y la presentación de anoche fue un claro ejemplo de por qué siguen siendo tan queridos.
El repertorio incluyó temas clásicos que han marcado la carrera de la banda, como "Anda borracho pancho" y "A esa gran velocidad", así como nuevas canciones que fueron recibidas con gran entusiasmo por el público. La mezcla de ritmos potentes y letras que narran las vivencias del barrio y la lucha diaria, resonó con fuerza entre los asistentes, quienes no pararon de corear y bailar durante toda la noche.
El público, completamente entregado, acompañó a la banda con sus voces, creando un momento mágico que cerró la noche de la mejor manera posible.
El éxito de la noche reafirma a El Condado como uno de los espacios más importantes para la escena rockera de Irapuato. Con eventos como este, el bar continúa consolidándose como un lugar donde la música y la pasión por el rock encuentran su hogar. Sin duda, los fanáticos del rock urbano en la ciudad ya están esperando la próxima tocada que les permita vivir otra noche inolvidable como la que se vivió el pasado sábado con "El Beso de Judas".
Esta noche dejó claro que el rock urbano en Irapuato sigue más vivo que nunca