Paolo Perusquía Herrera, se convirtió en hijo de Dios al recibir el Primer Sacramento de la iglesia católica, en la fuente bautismal de la Parroquia de Santa Margarita María Alacoque.
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Al sagrado recinto el nuevo cristiano llegó en brazos de sus padres, Carlos Perusquía Torres y María Fernanda Herrera Martínez.
Para esta importante ocasión, el matrimonio Perusquía Herrera eligió como padrinos de su heredero a sus tíos Ernesto Perusquía Torres Zamait López de Perusquía.
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En el solemne acto religioso, el sacerdote Juan Salvador Durán, les recomendó a Carlos y María Fernanda, enseñarles lo mejor de ellos a su niño, ser ejemplos de vida para él y educarlo en la fe.
Al término de la ceremonia, los esposos Perusquía Herrera recibieron afectuosos abrazos de sus seres queridos.
Posteriormente se ofreció una inolvidable fiesta, en la cual los papás celebraron con sus ahora compadres, familiares y grupo de buenos amigos el bautizo de Paolo.